viernes, 30 de diciembre de 2022

Asuntos de prórroga


Escribir desde la terquedad del solitario es un acto que sin duda debe tener algún sentido. Salvo quienes tendemos a escribir y alguna que otra vez retomamos esta reflexión, en realidad eso de darle estructura a la escritura no es asunto de quien escribe sino de quien lee. Se escribe por un elevado sentido de necesidad, pero sobre todo por un apego a la grandilocuencia sin el cual el acto literario no tendría fundamento. En general, quienes escribimos tenemos confianza en lo que hacemos, independientemente de que se trate de un sinsentido o si es que fuese el caso, el sentido se lo habrán de encontrar otros.

De viajes y otros enredos

Viajar, aunque sea de manera placentera, supone un esfuerzo. Incluso si lo hacemos en la más aventajada de las clases, se necesita fortaleza para emprender cualquier viaje. De eso más o menos se le fue parte de la vida a Ulises o a quien encuentra en el viaje el sentido de la vida o la manera de sobrellevarla (sobrevivir). La aquiescencia, tan necesaria en ciertos momentos de la existencia, también puede significar la muerte para algunos. De ahí que el movimiento, sin estar sobrevaluado, es una instancia a la cual apelo con frecuencia. Me es tan propio viajar como respirar y en eso se me va parte del interés vital o formulado de otra manera, todo viaje representa un encuentro consigo mismo, pero, sobre todo, el viaje es la perpetuación inmediata de cualquier intento de trascender. Al viajar desarrollamos un movimiento que acaba con actitudes estáticas. A fin de cuentas, aquello que se mueve, potencialmente está relacionado con lo que se encuentra vivo.

Economía para vivir

El dinero sirve para comprar cosas que nos aligeren el viaje de la vida. Visto desde esa dimensión, la plata puede tener un lado ligero y amable. Siempre que se pueda aspirar a trabajar para el buen vivir, el trabajo es bueno. Si el trabajo no sirve para tener un sueldo mínimamente aceptable, no tiene mucho fundamento. Atesorar dinero por el afán de hacerlo es tan vacuo como vacía la existencia de quien lo hace. En asuntos económicos, a veces pasa que no se necesita ser tan avispado para hacer alguna fortuna. Los ejemplos abundan y los mercaderes de todos los tiempos son el mejor ejemplo. Un trabajo tan elemental como el del comerciante, genera mucho más dinero que el del hombre de pensamiento. De ahí que vale la pena pensar (filosofar) si genera satisfacción personal.

La pobreza de la política

Cada vez me alejo más de la política, lo político y de quienes cultivan esas horrendas disciplinas. Me place más vincularme con artistas, músicos, escritores o quienes encuentran en la bohemia una mejor manera de sobrellevar su vida. El análisis político es intrascendente por dos razones: En primer lugar, porque es un espacio en el cual ya no queda nada por aportar y en segundo lugar porque no hay manera de que quien ejerza la política no termine por envilecerse. De ahí que hay una ruptura clara en mi modo de conducirme y en los asuntos que me interesan, que no es otra cosa que volver a las cosas que siempre me han apasionado y dejar a un lado los lastres que con frecuencia nos hacen guiños.


Publicado en varios medios de comunicación a partir del lunes 26 de diciembre de 2022 (incluyendo el diario El Universal de Venezuela -27-12-2022).

Isla de Chiloé. Salmón con papas nativas

miércoles, 21 de diciembre de 2022

De fútbol y otros festejos

 


Me tomé unos días libres para poder ver el mundial de fútbol 2022 y vaya si valió la pena.

Argentina y sus logros

De la mano de Lionel Messi, los argentinos lograron la final soñada. Contra el adversario más difícil y en un partido que bien pudo cortarle para siempre la respiración a cualquiera, se hicieron de su tercera copa del mundo luego de décadas de sequía futbolística en esta competencia tan exigente, la más importante de todas. Argentina es merecidamente el campeón del mundo de 2022 y su capitán el mejor jugador de fútbol de toda la historia.

El mundo da vueltas y cambia

Europa va cambiando. La desesperada necesidad de migrar a mejores destinos ha hecho que un sinfín de personas provenientes de África se hayan visto forzadas a buscar mejores destinos. Es un asunto tan natural, como natural es la existencia y lo digo con conocimiento de causa por mi carácter de migrante. Las nuevas generaciones de jóvenes nacidos en el continente de viejos (y viejas tradiciones) han modificado la tipología de los jugadores de las distintas selecciones. Basta con ver las fotos de la generación francesa que acompañaba a Michel Platini y compararla con el actual plantel de jugadores de fútbol para tener el botón de muestra para entender que esos cambios no solo son de carácter étnico sino de profundo relevo generacional, pues toda migración masiva y continua lleva consigo la transformación del lugar que se tenga como destino. Desde los cambios propios de la cultura, como la lengua, hasta la religión y las tradiciones. La migración lo cambia todo. Generalmente para mejor y sin excepción los cambios llegan para quedarse. Luchar contra la migración es arar en el mar.

Cambios y recambios

Migrar es un derecho humano. No se migra para turistear, sino con la finalidad de abrir un camino a la esperanza. Contra ese argumento no se puede batallar y a lo sumo, se podrían aclarar ciertas reglas de juego en donde siempre prevalecerá la premisa de que quien emigra a otra sociedad aportará sus elementos culturales a la misma. No los cambiará, sino que surgirá finalmente un ensamblaje tan idiosincrático como potencialmente inédito en el cual los elementos propios de las distintas culturas se irán potenciando unos con otros hasta llegar a una suerte de versión final civilizatoria que con el tiempo también irá cambiando. El cambio es una instancia de la cual podemos estar seguros. Pocas cosas permanecen estáticas.

Viva la Argentina

Un país hecho de migrantes que ha demostrado que es capaz de reponerse de los peores escenarios, en donde de manera recurrente, la pasión puede superar cualquier afán argumentativo. Argentina nuevamente es el ombligo del mundo futbolístico en donde el desborde de las emociones se ha hecho costumbre y que si miramos con detenimiento hay algo de cada uno de nosotros en ese país tan maravilloso que siempre es capaz de sorprendernos. Enhorabuena.

 

 

Publicado en varios medios de comunicación a partir del lunes 19 de diciembre de 2022 (incluyendo El Universal de Venezuela -20-12-2022).

lunes, 12 de diciembre de 2022

Punto de partida



Hoy me gustaría compartir tres reflexiones:

Toderos por montón

Hay toderos. Literalmente son aquellos que se dedican a explicar y ostentar conocimientos en torno a cualquier cosa que acontezca. Son expertos en todo y literalmente expertos en nada. Pueden dedicar horas a explicar la invasión de Rusia a Ucrania o la salida de Pedro Castillo del poder y lo hacen con desfachatez y ligereza que solo puede provenir de una incapacidad de conocer los temas sobre los cuales hablan con aparente propiedad. Mientras más campos del saber dominan, más superficiales se van haciendo. En la contemporaneidad, las redes sociales están plagadas de estos caricaturescos personajes que para colmo de males logran hacer que algunas personas les crean y se transforman en entes con capacidad de influenciar la opinión de los demás.

Literatura y otros géneros

Conversando con buenos amigos lectores en un café por los lados de Vitacura, coincidíamos en que hay libros que trascienden el propio género en el cual aparecen circunscritos y terminan por desdibujarse al punto de que es muy difícil poder encasillarlos. Estábamos en esa conversa cuando asomé mi percepción de que Ensayo sobre la ceguera, del escritor José Saramago, se podía leer más en clave ensayística-filosófica que como narrativa. Para mi sorpresa, coincidimos en la misma interpretación que nos llevó a otra, que es que con los libros de narrativa, en especial con el caso de la novela, ocurre que hay un montón de autores que han tratado de que su obra novelística sea más que una experiencia estética y trascienden por los caminos de un arte que conduce a laberintos de pensamiento que engrandecen la obra si es un buen escritor, como el caso de Saramago. Es fácil estrellarse al tratar de hacer una genialidad como esta y algunos ensamblajes fluyen mal si el escritor no domina el arte de las palabras a la par del oficio de cultivar ideas.

Juicios, prejuicios y puntos de partida

Generalmente las personas que opinan sobre esto y lo otro, sin mucho afán de profundizar, parten desde su percepción de las cosas que en realidad constituye un prejuicio condicionado por asuntos mal aprendidos y peor procesados. Un prejuicio es un juicio previo que se enclava antes de emitir un postulado. Si un prejuicio (juicio previo al desarrollo de una idea) es el punto de partida para elaborar un montón de premisas, lo más probables es que la totalidad de las premisas elaboradas sean asuntos totalmente falsos o a lo sumo, un compendio de medias verdades. Lidiar con la falsedad y los farsantes forma parte de las cosas con las cuales debemos seguir adelante, sin perder el tiempo en contemplaciones estériles. No es muy difícil saber quién puede potencialmente ser una referencia medianamente coherente, en un universo de estafas y ventas de imágenes sin sostén alguno. El transitar por el siglo XXI va de la mano de complejidades aparentemente inéditas que, si logramos ser acuciosos, pueden ser categorizadas y hacerse entendibles, en un ejercicio de pensamiento en donde una vez más la buena lógica y el afán de reflexión deberían por imponerse, a la hora de hacer aclarar las cosas. A fin de cuentas, si lo vemos bien, la posibilidad de pensar en relación con un asunto es hacerlo entendible.

 

Publicado en varios medios de comunicación a partir del lunes 12 de diciembre de 2022, incluyendo el diario El Universal de Venezuela (13-12-2022). 

martes, 6 de diciembre de 2022

Psicología y vida

 


Nos recuerda Konrad Lorenz:

“La verdad es que los animales me hacen reír muy pocas veces. Cuando esto ocurre, veo, después de considerarlo bien, que en realidad me he reído de mí mismo o de la Humanidad en general, que los animales saben caricaturizar de manera despiadada. Nos reímos ante la jaula de los monos, pero no nos reímos al contemplar un caracol o una oruga. El cortejo de un ganso gris nos parece irresistiblemente cómico, porque los jóvenes de nuestra especie se comportan de manera muy parecida.

La persona entendida no suele reírse de las curiosidades o rarezas del reino animal.  Me siento molesto cuando un visitante de un acuario o de un parque zoológico se ríe de algún animal, el cual ha adquirido una forma del cuerpo que se aparta de lo común, en un prodigio de extrema adaptación a cierto género de vida. 

Este “‘público’” se ríe de algo que para mí es sagrado: Los misterios de la transformación de las especies, la Creación y el Creador. Las formas, grotescas si se quiere, de un camaleón, de un pez-erizo o de un oso hormiguero jamás despiertan mi hilaridad, sino más bien un asombro rayano en la veneración.

… La verdad es que casi siempre que los animales me han hecho reír, me he reído en realidad de los hombres, de mí mismo, de los espectadores…”

Uno de los errores que con frecuencia se comete en psicología es el confundir la “psicología evolutiva” con la “psicología del desarrollo”.

La psicología evolutiva es un desarrollo de la sociobiología y, a menudo, se le llama neodarwinismo o darwinismo moderno. De acuerdo con la psicología evolutiva, los principios evolutivos se usan para unir la función original del comportamiento a los actuales mecanismos psicológicos, y la flexibilidad de respuesta es crucial para estos mecanismos.

La psicología del desarrollo, por otra parte, estudia los procesos de cambio psicológico del ser humano. Estudia desde lo psicológico al recién nacido, al niño, al adolescente, al adulto joven, al adulto maduro, al adulto mayor y al hombre senil. Además de estudiar los aspectos inherentes a la genética y las posibilidades de noxa que pueden existir y cambiar la dinámica relacionada con los cambios psicológicos. Todo desde su dimensión psicológica. O sea, que se ocupa de tratar de entender la psicomotricidad, las emociones, los afectos, la inteligencia, las cogniciones, la memoria, en fin, la forma de ser de la estructura psicológica, de acuerdo con las diferentes etapas de la vida.

El desarrollo de la idea de “existencia” ha de formar parte del objeto de la psicología, así como el asunto de la muerte.

La muerte, como parte del ciclo vital, nos induce a asomar la paradójica idea de que la muerte deriva de la vida. Por consiguiente, “la muerte es parte de la vida”.

Desde esta perspectiva es que la riqueza del estudio de la psicología del desarrollo es infinita; así como tratar de darle una dimensión de carácter racional y entendible a los distintos cambios psicológicos que atraviesa la persona conforme pasa el inexorable tiempo. 

 

Publicado en varios medios de comunicación a partir del 05 de diciembre de 2022, incluyendo el diario El Universal de Venezuela (06-11-2022). 

 

El texto original forma parte del libro de mi autoría Los cambios psicológicos, Consejo de Publicaciones de la Universidad de Los Andes. Venezuela, 2013.


 

 

 

domingo, 27 de noviembre de 2022

Buenos amigos

 


En uno de esos excepcionales viajes al pasado, me reuní con tres buenos amigos. Federico Fellini estaba joven y delgado, Milan Kundera hizo lo imposible por pasar nuevamente desapercibido y Joaquín Sabina estaba sobrio.

¿Acaso la bohemia que ha estado presente en largos períodos de mi vida ha podido transcurrir sin al menos uno de estos tres caballeros? Creo que no. Afortunadamente no.

De Sabina recuerdo la fiesta y la noche, los artilugios propios de un aprendiz de seductor y las excepcionales letras de sus canciones que agradezco y trato de compartir cuando la ocasión lo permite. Cada vez que he escuchado a Sabina, la vida se me vuelve exponencialmente pasional, por no decir que con facilidad se genera una dinámica indetenible de situaciones que llevan a laberintos de ansiedades que se agradecen. Bien puedo estar escuchándolo en la serenidad de la casa cuando no cruzando de una acera a otra mientras camino por la cuerda floja.

Federico Fellini no solo es el más grande de todos los cineastas que ha existido, sino que el cine, para decirlo en buen castellano, se divide en un antes de Fellini y un mientras tanto, dado que sus escenas son copiadas cuando no plagiadas por decenas de hombres de cine que necesitan recurrir al genio de este italiano sin igual. Amante de la buena mesa, la estética impoluta de la trasgresión y un afán por alcanzar la perfección, en sus películas descubrí que siempre se puede aspirar a más cuando de asuntos de arte se trata. Fellini es el ejemplo de eso.  

Milan Kundera me enseñó que las novelas son novelas, pero también son más que novelas, que hay una literatura que es de carne y hueso al punto de superar lo tangible de la existencia y que un autor se puede leer de manera total porque el afán de entender aquello que nos asoma como propuesta es en realidad una representación en el espejo del yo del escritor. El Arte de la novela transcurre en varios tiempos y escenarios en los que La insoportable levedad del ser suele salirse con la suya.

Estábamos animados y comenzamos con un buen tinto para no polemizar sobre cuál bebida seleccionar mientras aceitunas, carpachos, buenos quesos y espaguetis iban y venían en una de esas ocasiones infinitesimalmente improbables, pero no imposibles se daba frente a nosotros para goce y deleite eterno. Con amigos como ellos es muy difícil sentirse solo, más cuando cada uno me ha marcado al punto de que los llevo a los tres conmigo y hago lo posible por compartir sus lecciones con otros amigos, de una cadena de personas a quienes estimo enormemente y con quienes comparto las enseñanzas de estos tres curiosos maestros que tanto me han dado.

Esa última reunión fue importante, de hecho, me quedó la sensación de que no nos íbamos poder reunir de nuevo los cuatro. Sin embargo, los recuerdo cada jornada, uno a uno va y viene en el día a día de mi vida y sus cotidianidades. Los quiero mucho y les agradezco tantas veladas compartidas, que, sin duda, podré repetir con otras tantas personas cercanas con quienes comparto gustos afines y visiones de la existencia que nos hermanan. Para siempre.

 


Publicado en varios medios de comunicación desde el 27 de noviembre de 2022. Publicado en el diario El Universal de Venezuela el martes 29 de noviembre de 2022.

lunes, 21 de noviembre de 2022

Ciclo vital y muerte

 


El nacimiento y la muerte son procesos naturales, considerados tradicionalmente como el comienzo y final de la vida, pero su impacto psicológico y su significado personal varían sobremanera.  El nacimiento se espera con emoción y optimismo, pero casi siempre se evita la muerte, incluso cuando se cree en el más allá.

El Mundo Occidental, tecnológico y orientado a la juventud, tiene el curioso hábito de negar y evitar la muerte al mismo tiempo que muestra una extraña preocupación por ella; sobre todo en los medios masivos, aunque en éstos podemos desligarnos de ella y pocas veces pensemos que nos ocurrirá a nosotros. Creemos que los asesinatos y los accidentes fatales sólo les suceden a los otros.

En periodos anteriores de la historia, la muerte era un acontecimiento familiar. En general, tenía lugar en casa, en presencia de los pacientes que cuidaban al moribundo hasta el final. Incluso después del fallecimiento, los detalles de preparar el cadáver para el funeral eran un asunto familiar y comunitario.

En cambio, en el siglo XXI, hemos convertido la muerte en una especie de “maravilla tecnológica”. En el hospital, el personal médico atiende sus necesidades y los parientes se limitan a estar presentes. En muchos sectores de la sociedad occidental, los empresarios de pompas fúnebres preparan el cadáver para los ritos finales y el entierro; y el cuerpo se vela en una funeraria. En general, se limita mucho el contacto con el moribundo antes y después del deceso. De ahí que algunos señalan que vivimos en la era de la “muerte invisible”.

la negación es un mecanismo de defensa muy común para afrontar el estrés – simplemente nos negamos a ver la realidad o nos negamos a aceptarla -, pero puede resultar contraproducente. Afrontar de manera activa la muerte significa tomar las precauciones realistas respecto de los peligros de la vida sin limitarnos de manera innecesaria. Hemos de aceptar las limitaciones de la vida y nuestra vulnerabilidad, aunque estemos rodeados por imágenes violentas e irreales.

A medida que envejecemos o nos enfermamos, nos damos cuenta de que la muerte no es un hecho distante y su inminencia cruza nuestra mente cada vez con mayor frecuencia.  Los jóvenes pueden darse el lujo de desechar estos pensamientos, pero son inevitables en la enfermedad o en la vejez.  ¿Cómo reacciona la gente ante esta etapa final del desarrollo? Muchos pasan por etapas ordenadas de ajuste que al final abarcan la aceptación.

Etapas De Ajuste: Elisabeth Kübler-Ross (1969) fue una de las primeras en estudiar a fondo los temas de la muerte y la fase terminal. Se concentró en la situación relativamente breve en que la muerte se convierte en una posibilidad inmediata; por ejemplo, cuando a alguien se le diagnostica un cáncer terminal u otra enfermedad que pronto será mortal. A través de entrevistas exhaustivas con estas personas, identificó cinco etapas en el proceso de ajuste a la idea de la muerte: negación, ira, negociación, depresión y, finalmente, aceptación.

·        En la etapa de NEGACIÓN, la persona rechaza la posibilidad de fallecer y busca otras opiniones y diagnósticos más favorables.

·        Una vez que comprende que va a morir, siente cólera, resentimiento y envidia. Es la etapa de la IRA. Siente frustración de no poder realizar sus planes ni sus sueños.

·        En la etapa de NEGOCIACIÓN busca formas de ganar tiempo, haciendo promesas y negociando con su Dios, con los médicos, las enfermeras u otras personas para alargar la vida, para aliviar el dolor y el sufrimiento.

·        Puede sobrevenir la impotencia o la desesperación cuando fracasa la negociación o se acaba el tiempo. En la etapa de DEPRESIÓN el paciente llora las pérdidas que ya ocurrieron, la muerte y la separación inminentes de su familia y de los amigos.

·        En la etapa final de ACEPTACIÓN se resigna y se espera la muerte con serenidad.

Las etapas que describe ELISABETH KÜBLER-ROSS pese a que NO SON UNIVERSALES, nos ayudan a entender los sentimientos de quienes están a punto de morir.

Cualquiera que sea el trasfondo cultural, la idea de muerte y sus perspectivas a menudo imprimen un significado nuevo a la vida del individuo y de la comunidad.   Ante la muerte, reconsideramos nuestras prioridades y nuestros valores cuando tratamos de interpretar nuestra propia vida. La muerte del líder de una comunidad o de una figura pública, depura los valores individuales y comunitarios.  Con todo, las muertes más comunes a menudo contribuyen de igual manera a definir el significado del valor, la lealtad, la bondad y la virtud en una forma personal y duradera.

Independientemente de sus circunstancias, la muerte forma parte de la naturaleza. Es innegable y definitiva. Afecta a los miembros de todas las especies. Siempre se debatirá lo que está más allá de la muerte para cada uno de nosotros y probablemente la ciencia nunca nos lo revele; pero lo que está más allá para el Homo sapiens es una nueva vida para el que vendrá después.

 

Publicado en varios medios de comunicación a partir del 21 de noviembre de 2021, incluyendo el diario El Universal de Venezuela (22-11-2022).

 

El texto original aparece en el libro de mi autoría Los cambios psicológicos. Consejo de Publicaciones de la Universidad de Los Andes, Venezuela. 2013.


domingo, 13 de noviembre de 2022

Teoría de Jean Piaget

 


Han sido enormes los esfuerzos por tratar de entender el desarrollo de la mente, en particular, aspectos como la inteligencia y sus características. En lugar de tratar de explicar las diferencias individuales, Jean Piaget estaba interesado en la manera en que la inteligencia misma cambia a medida que los niños crecen. Llamó a esto epistemología genética. Representa un excepcional intento de entender un fenómeno de manera universal, que hasta el presente sigue siendo objeto de estudio y debate.

Según Piaget, el desarrollo cognitivo ocurre por medio de la interacción de las capacidades innatas con los sucesos ambientales y progresa a través de una serie de etapas jerárquicas, cualitativamente diferentes. Todos los niños atraviesan por las etapas en la misma secuencia sin saltarse ninguna o, excepto en el caso de daño cerebral, regresando a etapas anteriores (son invariables). Las etapas también son las mismas para todos, sin tomar en cuenta la cultura (son universales). Subyacentes a los cambios, existen ciertas invariantes funcionales, aspectos fundamentales del desarrollo que siguen siendo los mismos y funcionan de la misma manera a través de las diversas etapas. Los más importantes son asimilación, acomodación y “equilibración”. La principal estructura cognitiva que cambia es el esquema.

Un esquema es el elemento o unidad básica de la conducta inteligente. Piaget consideraba a los esquemas como estructuras mentales que organizan las experiencias pasadas y proporcionan una manera de comprender las experiencias futuras. Para Bee (2000) no constituyen tanto categorías como la acción de categorizar de alguna manera particular. La vida comienza con esquemas simples, que confinan en gran medida a los reflejos innatos (como el de succión y de asimiento). Estos operan de manera independiente de otros reflejos y se activan sólo cuando están presentes ciertos objetos. A medida que se crece, también los esquemas se van haciendo más complejos.

La asimilación es el proceso a través del cual se incorpora información nueva dentro de los esquemas existentes. Por ejemplo, los bebés succionarán de manera refleja un chupón u otros objetos, como un dedo; para aprender a succionar de una botella o beber de una taza, el reflejo inicial de succión debe modificarse a través de la acomodación.

Cuando un niño puede tratar con la mayor parte, sino todas, las experiencias nuevas a través de asimilarlas, alcanza un estado de equilibrio. Esto se obtiene con la “equilibración”, el proceso de buscar “nivelación mental”. Pero si los esquemas existentes son inadecuados para afrontar las situaciones nuevas, ocurre un desequilibrio cognitivo. Para restaurar el equilibrio, los esquemas existentes deben “ampliarse” para incluir (o “acomodar”) la información nueva. Los procesos necesarios y complementarios de asimilación y acomodación son el proceso fundamental de la adaptación.

Cada una de las cuatro etapas de Piaget representa una etapa en el desarrollo de la inteligencia (de aquí que se hable de inteligencia sensoriomotora, inteligencia preoperacional y demás) y es una manera de resumir los diversos esquemas que tiene un niño en un periodo en particular. Las edades que se muestran en el cuadro anterior son aproximadas, porque los niños avanzan por dichas etapas a tasas distintas debido a las diferencias tanto en el ambiente como en su propia maduración biológica. Los niños también atraviesan períodos de transición, en los que su pensamiento es una mezcla de dos etapas.

 

Publicado en varios medios de comunicación incluyendo el diario El Universal, de Venezuela, el 15 de noviembre de 2022.

 

El Texto original aparece en el libro de mi autoría Los cambios psicológicos, Consejo de Publicaciones de la Universidad de Los Andes. 2013.



jueves, 10 de noviembre de 2022

La adolescencia

 


de que desde hace varias décadas se ha generado un gran interés hacia la edad adolescente, se podrá pensar que estamos ante un tema muy valorado y estudiado a lo largo de la historia. No es así. Hasta el siglo XVIII los estudios de psicología del desarrollo se limitaron a la infancia. Se consideraba que la clave para explicar el desarrollo del hombre estaba en esa primera etapa de la vida.

Stanley Hall fue el autor del primer compendio sobre la adolescencia, Adolescence, en 1904. Considera la adolescencia, al igual que Rousseau, un segundo nacimiento que conlleva una gran inestabilidad psicológica. La describe como una etapa de la vida caracterizada por las perturbaciones de la conducta, como un periodo de tormenta y tensión (storm and stress). Atribuye un papel muy importante a la emotividad en la vida del adolescente. Por todo ello considera que la adolescencia necesita un tratamiento educativo aparte.

Piaget presenta la adolescencia como un estadio del desarrollo del ser humano ligado a la reestructuración de las capacidades cognoscitivas. Considera que con el acceso al pensamiento formal (forma suprema de pensamiento) se produce un salto cualitativo en el desarrollo con respecto al estadio infantil.

El comienzo de la adolescencia puede fijarse con bastante precisión. La adolescencia comienza cuando se inician los cambios biológicos de la pubertad. En las hembras ocurre alrededor de los once años, con la primera menstruación. En los varones sucede alrededor de los trece años, con la primera emisión de esperma. Hay que añadir que actualmente la pubertad tiende a adelantarse, a aparecer de modo prematuro.

El final de la adolescencia es mucho más complicado para determinar.

No hay unanimidad entre los diferentes autores con respecto a cuántas subetapas componen la adolescencia, cómo denominarlas y cuál es la duración de cada una de ellas. En la mayoría de los libros de psicología del desarrollo se habla de tres adolescencias:

1.   Adolescencia temprana o adolescencia inicial o pubertad.

2.   Adolescencia o adolescencia media.

3.   Adolescencia tardía o final o superior o edad juvenil.

En cuanto a la duración de estas tres etapas hay bastante coincidencia en lo siguiente:

-      Primera adolescencia: 11-13 años -femenino- y 13-15 -masculino-.

-      Segunda adolescencia: 13-16 años -femenino- y 13-15 -masculino-.

-      Tercera adolescencia: 16-19 años -femenino- y 13-15 -masculino-.

La adolescencia primaria o pubertad:

Es la fase de arranque de la maduración, el impulso inicial de la crisis del desarrollo. Es una transformación referida esencialmente al plano biológico, aunque no exclusivamente. Estos primeros cambios incitan al púber a romper con el pasado, a salir de la infancia, pero esta tarea no le resulta nada fácil. De hecho, son bastante frecuentes las conductas que denotan regresión a la etapa infantil (por ejemplo, seguir acudiendo a los padres cuando surge cualquier dificultad, o recurrir a la rabieta para conseguir la satisfacción de un capricho).

La segunda adolescencia o adolescencia media:

Es de mucho más difícil caracterización que la pubertad. Es la fase que no admite una caracterización universal, ya que las transformaciones de tipo psíquico son menos repetibles que las de tipo físico.

Si la pubertad se refiere sobre todo al desarrollo en el plano físico, la adolescencia media se centra en el desarrollo mental, afectivo y social. Si la pubertad era, esencialmente, una crisis de tipo biológico y hacia afuera, la adolescencia media es una crisis interior o de personalidad. En esta crisis tiene un papel clave una nueva capacidad: El pensamiento reflexivo. La capacidad de reflexión supone volver el pensamiento sobre sí mismo (pensar sobre lo que se piensa y sobre quien lo piensa). Esto hace posible el “descubrimiento del yo” y la revisión de la identidad personal.

En la medida en que el adolescente quiere ser él mismo y valerse por sí mismo, se encuentra con la necesidad imperiosa de adoptar nuevas formas de comportamiento, lo que le mueve, a su vez, a romper definitivamente con el pasado, con el modo de vida infantil.

La tercera adolescencia o edad juvenil:

Se inicia a partir del notable desarrollo de la personalidad alcanzado al término de la fase anterior. El joven cuenta de “salida” con estos puntos de apoyo:

·       Cierto conocimiento y aceptación de sí mismo.

·       Cierta información acerca de qué es lo que quiere en la vida.

·       Cierta disposición para realizar lo que desea sin esperarlo todo de los demás.

·    Cierta capacidad para convivir y cooperar con personas que piensan de modo diferente.  


     Publicado en en varios medios de comunicación a partir del lunes 07 de noviembre de 2022. Publicado en el diario El Universal de Venezuela el martes 08 de noviembre de 2022. 


   El texto original aparece en el libro de mi autoría Los cambios psicológicos. Consejo de Publicaciones de la Universidad de Los Andes, Venezuela, 2013.

martes, 1 de noviembre de 2022

Teoría etológica

 


La suposición de que los factores biológicos intervienen decisivamente en el desarrollo humano conserva su vigencia en la etología, disciplina que estudia el fundamento evolucionista de la conducta y el influjo que las respuestas evolucionadas tienen en la supervivencia de la especie humana y su desarrollo. Sus orígenes se remontan a Charles Darwin; pero la etología moderna se inspira en los trabajos de Konrad Lorenz y Niko Tinberg, dos zoólogos europeos cuya investigación con animales puso de manifiesto algunos nexos importantes de los procesos evolucionistas con la conducta adaptativa.

La suposición principal es que los miembros de todas las especies animales nacen con varias conductas “biológicamente programadas” que son:

1)   Producto de la evolución.

2)   Adaptativas en el sentido de que favorecen la supervivencia.

Muchas especies de aves por ejemplo parece que nacen con una preparación biológica que les permite ejecutar conductas instintivas como seguir a su madre (respuesta llamada IMPRONTA que sirve para proteger a la cría contra los depredadores y garantizar que encuentre alimento), construir nidos y cantar. A Konrad Lorenz se le atribuye el haber descubierto el proceso de improntación en sus experimentos con gansos, en los cuales lograba que los siguieran a él y no a su madre. Se cree que las características biológicamente programadas han evolucionado mediante el proceso darwiniano de selección natural: A lo largo de la evolución las aves con genes que favorecen estos comportamientos adaptativos tenían mayores posibilidades de sobrevivir y de transmitirlos a sus crías que las que carecían de ellos. A través de muchas generaciones los genes de las conductas más adaptativas se generalizaron en la especie, caracterizando a casi todos sus miembros.

Los etólogos se concentran en las respuestas innatas o instintivas que:

1)   Comparten todos los miembros de una especie.

2)   Pueden distinguirlos por vías evolutivas semejantes.

¿Dónde buscar ese tipo de conductas y estudiar sus efectos en el desarrollo? Los etólogos prefieren estudiar los animales en su entorno natural, convencidos como están de que las conductas innatas moldeadoras del desarrollo humano (o animal) se identifican y se interpretan más fácilmente al observarlas en el hábitat donde evolucionaron y han favorecido la supervivencia.

Algunos etólogos que estudian al hombre, como el caso de John Bowlby, piensan que el niño muestra gran diversidad de comportamientos preprogramados. También que todas ellas favorecen un tipo especial de experiencia que ayudará al individuo a sobrevivir y alcanzar un desarrollo normal. Por ejemplo, el llanto del niño sería una “señal de sufrimiento” programada biológicamente que atrae la atención de los cuidadores. No sólo el niño está biológicamente programado para indicar su sufrimiento con llanto fuerte y estruendoso, sino que según los etólogos también los cuidadores tienen cierta predisposición biológica para reaccionar ante tales señales. Así pues, el valor adaptativo del llanto garantiza que:

1)   Se satisfaga sus necesidades primarias (hambre, sed, seguridad).

2)   Que tenga suficiente contacto con otras personas para establecer apegos emocionales básicos.

Aunque los etólogos critican a los teóricos del aprendizaje por prescindir de las bases biológicas del desarrollo humano, reconocen que éste no se da sin el aprendizaje. Así, el llanto del infante puede ser una señal innata que favorece el contacto humano a partir del cual se realizan los apegos emocionales. Pero no ocurren en forma automática. Antes debe aprender a discriminar los rostros conocidos y los de los extraños para poder establecer un vínculo afectivo con el cuidador. Se supone que el valor adaptativo de este aprendizaje discriminatorio se remonta a un periodo de la historia de la evolución en que las personas se desplazaban en tribus nómadas desafiando los elementos. En aquellos tiempos remotos era indispensable que un infante estableciera un vínculo con los cuidadores y desconfiara de los extraños, pues si no lo hacía podía ser fácil de un animal depredador.

A nuestro criterio, la cantidad de elementos que consideramos culturales puede ser muy amplia, mas todo elemento asumido como cultural posee un trasfondo, de carácter biológico, que induce su perpetuación, si es necesario o considerado beneficioso para la preservación de la especie. 


Publicado en el diario El Universal de Venezuela (y otros medios de comunicación) el martes 01 de noviembre de 2022.

 

El texto original aparece en el libro de mi autoría Los cambios psicológicos. Consejo de Publicaciones de la Universidad de Los Andes. 2013.



domingo, 23 de octubre de 2022

De vueltas y revueltas

 


Si se pudiera ir directo de Venezuela hasta Estados Unidos, como durante décadas han hecho los balseros cubanos, el Caribe estaría lleno de compatriotas, tratando de labrarse un mejor futuro en esta vida. El asunto es que estamos en Suramérica, y la migración de los venezolanos fue mayoritariamente por tierra hacia sus vecinos más cercanos. Esa migración de carácter masiva, continua, ininterrumpida y con elementos que permiten predecir una buena permanencia en el tiempo, fue provocada y el escandaloso origen de ésta será tema para análisis por personas que cultivan las más variadas disciplinas. Mientras tanto, en plena contemporaneidad, seguiremos poniéndole la lupa de nuestro interés a este fenómeno inédito en la región.

Migración y enfermedad mental

Es un tema clásico de la psiquiatría el estudio de las poblaciones migrantes. Tradicionalmente se ha reportado, por ejemplo, que los migrantes de segunda generación (los que nacen en el lugar a donde se arriba) constituyen un grupo más propenso a desarrollar enfermedades mentales. Por una parte, se genera la ya consabida dificultad para asimilarse a una nueva cultura y por otra, está recibiendo un doble mensaje con relación a la realidad. El doble mensaje puede trastocar el sistema de valores del sujeto. Por una parte, sus padres y familiares les señalan los modelos de vida a seguir, propios de su lugar de origen y por otro lado el sitio en donde se asienta tiene su propio sistema normativo. Este doble vínculo o propensión a los dobles mensajes, muchas veces irreconciliables, es un caldo de cultivo para el desarrollo de las enfermedades mentales, que en el caso de los migrantes son muy floridas.

De duelo en duelo

La migración, cuando es de carácter forzosa, siempre representa un duelo. Es una pérdida y emocionalmente el individuo que la padece se comporta como quien vive una merma. Hay etapas para desarrollar ese duelo, en las cuales la conflictividad ha de estar presente por un buen tiempo cuando no de manera permanente. Los duelos van de la mano con la nostalgia y la tristeza y potencialmente se pueden transformar en depresiones, que son enfermedades mentales complejas. Cuando se tiene que migrar más de una vez, puede aparecer la desesperanza. El migrante desarrolla un duelo en donde hasta la culpa podría estar presente. De ahí que quien migra forzosamente de manera repetida, va acumulando duelos y el desarraigo se anida. En esta experiencia dolorosa, la sensación de pérdida se puede volver exponencial. 

Lunas de miel y pisando tierra

Al migrar, hay fases, una de las cuales puede constituir la luna de miel del migrante, donde todavía no ha terminado de pisar tierra. Luego, como todo, irá haciéndose paso por la dura realidad y se dará cuenta que a los mejores sacos se le pueden ver las costuras. Una de esas cosas propias de quien migra es reconocerse como miembro de una cultura y tener que asimilarse a otra, que generalmente le va a terminar por ser ajena. Sortear ese tránsito forma parte de las habilidades de cada uno y de salir airoso dependerá mucho de la capacidad adaptativa del sujeto y de las características de la cultura a la cual se intenta asimilar. Por otra parte, en un fenómeno migratorio de carácter tan masivo como el venezolano, que ya apunta a llegar a los ocho millones de almas, está el perfil del migrante profesional de carácter parasitario que no es un aporte ni al grupo cultural al cual pertenece ni al país al cual emigra. De eso, lamentablemente se hace más eco en los medios de comunicación y abultan las páginas rojas. Son olas que van y vienen en donde aparece el descrédito como juicio a un grupo cultural. Como en todo, el tiempo hace su trabajo.

Retorno a la patria

En el fenómeno migratorio venezolano, ha aparecido el migrante que retorna a Venezuela, otea la realidad y vuelve a emprender el viaje. Ese migrante termina siendo sinónimo de inestabilidad emocional. Migrar no es como caminar y comer chicle. Las cosas se hacen de manera calculada o tienden a no salir bien. Independientemente de lo que digamos quienes tratamos de compilar información en relación con el partir y los datos sobre la diáspora, la experiencia de cada uno es un testimonio de enorme riqueza. Cada cual se va labrando su propia percepción del asunto e irá haciendo sus respectivas conjeturas. Lo que no mienten son los números que, en su carácter brutal, impersonal y duro, muestran una realidad ante la cual es difícil voltear la mirada. La infinita irresponsabilidad y ligereza con la cual se ha tratado la migración venezolana es un escándalo para la raza humana. Migraciones por destruir sociedades, sumado a una pandemia, además de la guerra y la recesión económica que aplastará pronto a la civilización sólo asoman futuros llenos de nubarrones. Esperemos que, como todo ciclo, finalmente las cosas den un vuelco y resurja la esperanza para los millones de personas que un día conocieron el paraíso en la tierra: Venezuela.

 

Publicado en el diario El Universal de Venezuela (y otros medios de comunicación) el martes 25 de octubre de 2022.

lunes, 17 de octubre de 2022

La adultez

 


Muchos teóricos consideran que las preocupaciones e intereses adultos están dispuestas en un patrón, de tal manera que se puede hablar de etapas del desarrollo adulto. Tres tipos de influencia pueden afectar la manera en que uno se desarrolla en la adultez:

1.   Las influencias normativas graduadas por la edad: son cambios biológicos (como la menopausia) y sociales (como el matrimonio y la paternidad), ocurren a edades relativamente predecibles.

2.   Las influencias normativas graduadas por la historia: son sucesos históricos que afectan a generaciones completas o cohortes aproximadamente al mismo tiempo (los ejemplos incluyen guerras, recesiones y epidemias).

3.   Las influencias no normativas son transiciones idiosincrásicas, como el divorcio, desempleo y enfermedad.

Algunos sucesos vitales críticos – como el divorcio, el desempleo y el duelo – pueden ocurrir en cualquier época durante la adultez. Otros ocurren tarde en la adultez, como el retiro o la jubilación. Mientras que otros tienden a presentarse al inicio de la edad adulta, como el matrimonio (o vida en pareja) y la paternidad.

El matrimonio es un ejemplo de influencia normativa graduada por la edad.  Durante largo tiempo se ha reconocido que el estado civil afecta la mortalidad. Las personas casadas tienden a vivir más tiempo que los solteros, son más estables, sanos y tienen menores tasas de trastornos mentales que los solteros, viudos o divorciados.

En relación con el concubinato: Cerca del 40% de las parejas que cohabitan no se casan. Quienes cohabitan y posteriormente se casan, están en mayor posibilidad de divorciarse.

El divorcio es un factor estresante tanto para hombres como para mujeres, dado que implica la pérdida de una de las principales figuras de apego y fuente de apoyo emocional. Pero los hombres parecen experimentar más estrés que las mujeres, lo cual quizá no sea del todo sorprendente dados los potenciales mayores beneficios del matrimonio para el varón. También, el divorcio puede tener graves efectos sobre la adaptación psicológica de los hijos de padres que se están separando.

La paternidad trae consigo diversas adaptaciones psicológicas: Por ejemplo, muchas mujeres se preocupan de que su bebé pueda ser anormal y sobre los cambios en su cuerpo y qué tan bien podrán afrontar la maternidad. Otra preocupación es la manera en que se verá afectada la relación con sus maridos o parejas. Aunque el embarazo puede unir de manera estrecha a muchas parejas, muchos hombres requieren más tiempo que las mujeres para sentir que participan emocionalmente – y algunos sienten que se les ha excluido -. Es posible que este sentimiento de exclusión continúe después de que el bebé haya nacido, ya que la madre se preocupa por él. Quizá estar en el nacimiento de su hijo puede contrarrestar los sentimientos del padre acerca de haber sido excluido durante el embarazo – y después -. También puede ayudarle a formar un lazo emocional con el bebé.

La satisfacción matrimonial tiende a ser más alta antes de que lleguen los hijos. Después cae y permanece relativamente baja mientras haya hijos dependientes en el hogar. Finalmente, se eleva de nuevo durante las etapas de “pospaternidad” y retiro. Para los nuevos padres, sus roles como padres y cónyuges son, cuando menos, parcialmente incompatibles. Los nuevos progenitores informan que tienen menos tiempo para dedicarse el uno al otro, ya sea para la conversación, para las relaciones sexuales, para ser afectuosos o para continuar con las tareas rutinarias que solían hacer juntos. Por supuesto, padres y madres son figuras de vinculación para sus hijos dependientes. A diferencia de la relación con una pareja, la relación con un hijo es asimétrica. Esta nueva forma de responsabilidad puede ser muy estresante y tiene implicaciones para la manera en que los padres se adaptan a estas nuevas se adaptan a estas nuevas demandas del rol y para la calidad de sus interacciones con el niño. GROSS, RICHARD (2004).


Publicado en el diario El Universal de Venezuela (y otros medios de comunicación) el 18 de octubre de 2022. 


El texto original aparece en el libro de mi autoría Los cambios psicológicos. Consejo de Publicaciones de la Universidad de Los Andes. 2013.



domingo, 9 de octubre de 2022

El mundo que se mueve

 


No es casual que, en el máximo apogeo de una cultura o sistema civilizatorio, el mismo se desmorone al punto de ser barrido en su esencia. Ha pasado antes y seguirá ocurriendo. Pareciera que, en ímpetu aspiracional de querer más, la inconformidad supera cualquier asomo de racionalidad y a los pueblos le ocurre como Ícaro, quien queriendo ascender cada vez más y más se le ablandó la cera que unía las plumas y éstas se despegaron. Según la mitología griega, se le colocó el nombre de Icaria al sitio donde murió.

Testigos de primera fila

Si bien no es casual que las sociedades se desmoronen en su esplendor, sí es extraordinario tener asientos de primera fila y ser vivos representantes de los alcances de la destrucción de un colectivo. Del gran auge económico que produjo la renta petrolera en Venezuela, se pudieron cosechar cosas muy positivas, una de las cuales fue la inversión en materia educativa por parte del Estado. La educación gratuita para ricos y pobres generó un igualitarismo pocas veces vistos en sociedad alguna. El proveedor sistema político destinó una enorme cantidad de recursos económicos en educación de la cual muchos nos pudimos beneficiar. Tal vez el máximo desarrollo económico y educativo de una sociedad sean también el mayor punto de esplendor de su decadencia. A veces pienso que occidente está atravesando por una era en la cual lo tecnocientífico está siendo utilizado para la autodestrucción de una manera tan afinada que pareciera que cualquier aprendizaje anterior hubiese sido inútil.  Entonces, por querer más, Ícaro siempre merece morir.

Tras la selva de Darién

Los fenómenos atinentes a los cambios sociales potencialmente se tergiversarán por nuestras pasiones. A fin de cuentas, si queremos analizar un fenómeno, se debe hacer de manera fría y serena o de lo contrario solo estaremos emitiendo sonidos propagandísticos en relación con un asunto que merece observación y reflexión. Las cosas generalmente no son como nos gustaría que fuesen, sino que son como son. De ahí que el análisis de las cosas que ocurren se debe despojar de nuestro deseo y transformarse en argumentación con un mínimo de rigurosidad. Si de un país salen casi siete millones de personas, los elementos causales, que lo provocaron, deben ser evaluados con altura de miras. La estampida va de la mano con la desaparición del tejido social que cohesionaba a un grupo de seres en torno a un propósito futuro. Al desaparecer el propósito, es momento de gritar la consabida consigna: “sálvese quien pueda”.

Acciones y reacciones

Mientras el “progresismo” siga enarbolando como fin último planes en relación con una visión vengadora del pasado, encontrará resistencias imposibles de sortear. Si esas resistencias hacen su trabajo, es posible que una sociedad no se desmorone. En la Venezuela de donde logré escapar se trató de hacer una suerte de barrido con el pasado sin que surgiese una fuerte resistencia que se opusiera. El resultado está a la vista de todos y lo que triunfó fue el desmantelamiento de un país. En la medida que vayan surgiendo posiciones extremistas en relación con cómo le gustaría a un grupo que fuese el mundo, de la misma manera se irán creando contraposiciones conservadoras que actuarán como freno a estos ímpetus. De ahí que veamos un florecimiento de posiciones extremas, todo lo cual tiene una explicación entendible. A medida que se trate de imponer una concepción que divida y no unifique, lo esperable es que la contrapropuesta tienda a la radicalización. En ese mundo y en ese tiempo estamos los occidentales. La civilización tenderá a arribar a buenos puertos en la medida que los saltos al vacío queden fuera de juego. Lo que propende a unir, en general, tiende a ser bueno.  

Modas que maltratan

En 2005, como Profesor de la Universidad de Los Andes de Venezuela, pude hacer una rotación por el Servicio de Psiquiatría Infanto Juvenil del Hospital Gregorio Marañón, en Madrid, constituyendo una experiencia magnífica. Esa Unidad está liderada por el Dr. Celso Arango, siendo un referente mundial en lo que se refiere al tratamiento de personas en una edad tan sensible. Recientemente el Jefe de ese Servicio fue entrevistado por el diario El Mundo, señalando su preocupación por la manera como se ideologiza la sexualidad en nuestro tiempo y el titular es lo suficientemente contundente para resumir su pensar en relación a esta problemática: “Vivimos un boom de jóvenes que dicen ser trans por moda y en realidad no lo son.” De la seriedad con la cual se enfrente esta situación dependerá el futuro de una buena cantidad de jóvenes a nivel mundial. La posición del reconocido Dr. Celso Arango es casi un trino en el mar, en un momento en el que lo ideológico intenta anteponerse a las bases más elementales de lo biológico y las Sociedades Científicas quedan marginadas por la descabellada politización por parte de la Organización Mundial de La Salud. Seguimos con boletos de primera fila.

 

Publicado en el diario El Universal de Venezuela (y otros medios de comunicación) el 12 de octubre de 2022.