lunes, 9 de noviembre de 2015

Todos somos sirios


Hay muchos que presumen el haber tenido una abuela sabia que dejó un legado lleno experiencias que nutren y cohesionan a los miembros de la familia. En mi caso tuve la fortuna de haber tenido ‘dos’ abuelas que imprimieron sus palabras a sus descendientes y cada día que pasa solemos recordar sus enseñanzas. En este texto me referiré a una de las muchas cosas que aprendí de mi abuela materna.
Venía del horror de la segunda guerra mundial en donde ya se había vuelto costumbre el abrir la puerta de la casa con una escopeta en la mano, ‘sólo por precauciones mínimas’. El abuelo había estado en el frente de guerra desde el año 1939 hasta 1945, pero además había servido cuatro años antes en Libia, lo que sumaba once años de beligerancia en la vida de un hombre que murió alrededor de los cincuenta años de edad.
Se trataba de una familia que llegó al mejor país del mundo llamado Venezuela, en donde se abrían todas las puertas del futuro y esperanza para quienes huían de la muerte, la ruina y la desventura. Soy descendiente de la estirpe de emigrantes que formamos parte del universo de interrelaciones culturales y étnicas que nos hacen copartícipes de una sola manera de ver la vida y entender que los seres humanos solamente podemos ser de un tipo y las divisiones no tienen cabida. Somos hijos de los sobrevivientes de las causas perdidas que una y mil veces han trastocado los destinos de la humanidad.
Cuando un pueblo es perseguido o amenazado, sencillamente siento que pertenezco a ese pueblo, porque en mis raíces parentales la supervivencia es el fin último de todos los proyectos trazados. Resulta que el tío Pepe, recientemente fallecido, siendo el mayor de los hijos de mi abuela, se vio forzado a trabajar a mediados del siglo pasado en las tortuosas rutas comunicacionales del estado Lara, manejando camiones desde que era apenas un muchacho, con un permiso especial, llevando mercancías desde Quíbor hasta Humocaro Alto, pasando por Cubiro, Sanare y pernoctando incluso en las tierras portugueseñas de Chabasquén y Biscucuy. Quiso la mala fortuna que con un camión recién comprado y esquivando una roca en tan intrincadas carreteras, se volcó al precipicio y quedó guindando de la rama de un árbol por el ruedo del pantalón.
Pasaban y pasaban los viajeros que con temor se asomaban a ver al muchacho colgando a punto de perder la vida. Se iban amontonando al borde del abismo a mirar lo que sería un trágico e inexorable final, hasta que un par de robustos jóvenes, acaso un tanto mayores que mi tío y que apenas hablaban español, se lanzaron amarrados de una larga soga arriesgando sus vidas para rescatarlo. El tío Pepe salvó la vida de esta forma y cuando el par de hermanos llegó a la casa de mi abuela después haberlo socorrido, el decreto de la nonna, luego de conocer su procedencia, no se hizo esperar: “En esta familia todos somos sirios”.
Desde ese día unos europeos llegados a América de los cuales soy descendiente, hicieron amistad, cultivaron el respeto e incluso el parentesco, con árabes provenientes del digno pueblo de Siria. Siendo fieles al legado de mi abuela, no sólo cultivamos el aprecio por quienes son mis hermanos anímicos, sino que comparto su sufrimiento, porque no se es humano si no se es solidario con el dolor de quien por desventura le toca vivir la trágica experiencia de la guerra y el peregrinaje como emigrante que busca un mejor porvenir para su descendencia.
Desde lo ético, que es el ejercicio intelectual que está por encima de la moral, somos sirios porque nos solidarizamos con el que es perseguido por la barbarie y a duras penas sobrevive a un “viaje” injusto. Desde nuestros más originarios confines espirituales, somos sirios porque descendemos de la misma tradición que señaló que sólo existe un Dios y que está representada en la misma raíz que es Abraham, que es el profeta que une el judaísmo, el cristianismo y el islam. Desde lo fraternal, porque mi padrino es sirio y es uno de los ciudadanos más correctos y ejemplares que he conocido en mi vida.
Somos sirios, porque somos universales y revisando mi árbol genealógico hasta donde se puede, mi  Péres es en realidad con “s” y no con “z”, en un intento de mis predecesores judíos sefardíes que trataban de ocultar su origen cambiando la última letra del apellido para protegerse de las persecuciones religiosas.
En lo particular soy sirio, islámico, judío y cristiano, porque soy venezolano, porque sólo se puede ser una persona honesta cuando no relegamos a nadie por su origen. Menos aún siendo procedente de todas las maneras étnicas de expresarse un mestizaje infinito, sin posibilidades de desligarme de cualquier  manifestación de lo que pretenda ser humano.  
Ser ciudadano, a veces, necesariamente implica no pertenecer a una ciudad o a un país en particular. En ocasiones ser ciudadano del mundo es un asunto supramoral”. Un imperativo categórico que está por encima de cualquier posible diferencia aparente.



Twitter: @perezlopresti


Publicado en el diario El Universal de Venezuela el 09 de noviembre de 2015   


28 comentarios:

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  2. Sin duda, estamos vinculados a una generación que desde tiempos bíblicos marcaron nuestra descendencia, La historia relata que Abraham al unirse con su criada procrea un hijo llamado Ismael el cual pasa hacer el Padre de los pueblos Árabes, de igual modo Isaac siendo hijo legitimo de Abraham y su esposa Sara es parte de los Patriarcas de los pueblos Israelitas. Es necesario señales que la religión de estos dos pueblos, tanto el Islam como el Judaísmo e incluso el Cristianismo su doctrina se basa en la tradición que solo existe un Dios y que está representada en la misma raíz de Abraham. Esto desde un ámbito Ideológico podemos decir TODOS SOMOS SIRIOS.

    Siria un país soberano del Oriente próximo, en la costa Oriental Mediterránea, un pueblo que vive una guerra civil; sus causas la corrupción en lo político, la pobreza, la violación de los derechos humanos, la injusticia y la desigualdad que fueron semillas en este conflicto. TODOS SOMOS SIRIOS, si somos humanos y solidarios con la gente que vive sin paz en pueblos donde predomina la guerra, consecuencia de la inestabilidad social, donde la única salida es emigrar a otros países en busca de calidad de vida y un mejor futuro para su descendencia.

    Es allí donde lo ético y lo moral entra en manifiesto, transmitir solidaridad con este pueblo, que huyendo de esas condiciones de vida busca en países del Occidente sobrevivir a su trágica realidad.

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  3. Sin duda alguna todos somos sirios, no soy una persona muy religiosa, entonces para mi ser sirios no va en cuanto el legado del hijo de Abraham, sino en cuanto a los problemas políticos de los derechos humanos, lo que distingue a Siria con Venezuela, es el grado de intensidad que el gobierno y la parte de la oposición la toma como manera de solventar el problema, al parecer la guerra se ha convertido en la única solución, algunos de los ejemplos más claros Segunda Guerra Mundial (1939-1945), Primera Guerra mundial (1914-1918), Guerra Fría (1947-1991), Guerra de Vietnam (1964-1975) y la Revolución Francesa (1789-1799), todas tienen en común periodos de mucha violencia que fueron por la consecuencia socio-político, y sí, fue una manera abrupta que cobro miles de vidas, pero fue la una manera de escapar y superar el conflicto.
    A Venezuela, mi hermoso país, puede tomar la esta forma abrupta, es algo que por mi parte nunca la tomaría por solución, pero estamos en momentos en que perderemos todas esperanzas, se ha tomado muchas formas para solventar el problema, pero el problema viene del gobierno ignorante, que solo utiliza a una figura de una persona muerta, del mismo partido político que gobierno años atrás, la toman como figura de un Dios, pero un Dios que nos inmortal, entonces no es Dios, para mi es una simple persona que llego a la presidencia, pero nada más, a los seres humanos no se debe idolatrar, pero existe personas estúpidas que las veneran.
    De mi parte les deseo mucha suerte a los Sirios, para que logren la libertad de sus derechos humanos y que hagan justicia por los actos tan crueles que están viviendo, y para mi Venezuela, que tengamos más sentido común, y que por favor, si entra un nuevo partido par a gobernar, no hagamos los mismo que este gobierno, no adoremos ni le rendiremos por sus actos, porque ellos solo nos estarán dando lo que por derecho nos pertenece, suena duro, pero es mejor ser duro, y no permitir que nos vuelvan a derrumbar.

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  4. La dura realidad es triste ver la situación por la que están pasando los sirio guerras y guerras recibiendo bombardeos a cada rato, hay naciones que se quejan tanto por algo que tiene mas facilidades de solucionarse, pero no se acuerdan que al otro lado del mundo hay masacres sin dolor, no tienen dolor o será que habrá que llevarlos allá para que vean lo que es sufrimiento de verdad de mucha gente que no ve esperanzas de vida, muchas personas buscando otros países luchando por su felicidad, las últimas esperanzas no sólo de ellos si no de mi Venezuela es que no hay mal que dure 100 años y menos por nuestra parte que sigo diciendo que es un capricho del que está montado allí, hay mucha gente en la calle que si escuchas algunas conversaciones de la situación, están totalmente cegadas manipuladas, y para decirles nada porque se ofenden, algún día entenderán la verdadera realidad, lo mas seguro que todo el que quiere estar allí montado en el gobierno en algún momento cae en la corrupción, pienso que la mayoría de los políticos hablan y prometen pero por medio hay un interés, la ambición que los conduce a robar y llevar algo de mal en peor, dios quiera que el próximo gobierno no sea así, y si no, seguiremos viviendo y diciendo somos sirios, simplemente se enredan en algo sencillo, todo avanza y ya vemos las consecuencia donde estamos, eso es probable que muchos que están en un cargo no son fieles al país, es grave la cadena inmensa de gente que hunden a Venezuela, algún día se acabará todo esto o al menos mejorará un poco, las esperanzas no se pierden, hay que pensarla como abraham, todo por sobrevivir y ir mas allá.

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  5. Es magnífico cuando los seres humanos de manera propia nos damos cuenta del gran sistema del cual somos parte. Sin embargo, llegar a tener una compresión real de lo que es ser “Ciudadano del Mundo” no es nada fácil.

    La mayoría de los países que se han percatado de la importancia de la cooperación a escala mundial no han precisamente reconocido este valor por arte de magia, los pueblos con un pensamiento integracionista han trascurrido escenarios muy despóticos derramando mares de sangre, han sufrido lo que muchos otros solo pueden apreciar mediante los libros de historia, aun así nunca sería suficiente para entender a plenitud los verdaderos horrores que llevan a los ciudadanos de un país a conciliar en un pensamiento que representa nuestra subsistencia como especie.

    Como dijo el ex embajador del Japón en Venezuela, Masateru Ito :
    “En el mundo de hoy, cada vez más interdependiente, ningún país es capaz de procurar su propia paz y prosperidad de manera aislada del resto del mundo.”

    Sin embargo, los grandes antagonistas en nuestra historia siempre han sido los pensamientos extremistas recreados bajo conceptos de sobrevivencia, es decir, los diferentes pensamientos ideológicos sin ningún tipo de razonamiento lógico de convivencia mutua.

    Es importante resaltar que, en ningún momento nuestros lazos y orígenes culturales nos hacen superior o inferior a otros, se trata del manejo de la lengua, en ella se encuentra la gran transgresora.

    De esta manera los principios de coexistencia son moldeados para ser de sobrevivencia y canibalismo. Las grandes ideologías normalmente buscan asegurar sus creencias bajo la premisa de aniquilación a aquello que no represente sus pensamientos y nunca a un análisis y comprensión del mismo, es evidente que aun con un amplio campo de razonamiento cerebral, el instinto natural de los seres vivos siempre estará latente en el hombre.

    Entonces ¿qué debemos hacer para entender y darnos a entender? Es una gran pregunta y como tal solo puede ser abordada por pueblos con la bandera de paz en sus mentes, corazones y acciones.

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  6. Todos somos sirios:
    Antes de identificarnos como miembros de un grupo étnico o como parte de un grupo social debemos concientizar que nuestra primera e irrevocable identidad es la humana, condición que nos convierte de manera automática en seres gregarios ubicándonos en escenarios de constantes interacciones con otros individuos. Aunado a esta identidad primaria surge la imperiosa necesidad de sobrevivencia y preservación de la especie, el cual implica un altruismo como un sistema de ayuda mutua y “desinteresada”, es por ello que de manera natural y espontanea sentimos el deber moral y ético de solidarizarnos ante el dolor ajeno o la persecución por causas fútiles e innobles. ¿Cómo voltear la mirada hacia el extremo contrario, cuando nuestros ojos perciben la barbarie a la que son sometidos pueblos o comunidades enteras, por grupos insurgentes y anárquicos? ¿Cómo mostrar indiferencia ante la persecución por causas fútiles? Y lamentablemente el escenario actual es un tema diario o noticia diaria en los medios de comunicación, sin embargo se hace evidente que la humanidad no ha aprendido que la violencia y la guerra no conduce a ganancias futuras, sin embargo es innegable que la ante la violación de los derechos humanos en el mundo actual, existe un vacío o limbo jurídico por cuanto ningún organismo internacional quiere colocarle el cascabel al gato, por el contrario se excusan con un sinfín de pretextos. Mientras tanto la contemporaneidad avanza, los perseguidos, emigrantes, refugiados continuaran su camino y los peores actos de atrocidad se seguirán cometiendo, en tanto todos somos sirios y nos solidarizamos con el daño ajeno y repudiamos la maldad de grupos de seres que perdieron su esencia humana. Pero cuando cambiara la historia. Por ahora solo queda abrir nuestro compás de tolerancia y respeto a la diversidad cultural que enriquece a las naciones del globo planetario.

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  7. TODOS SOMOS SIRIOS:
    Somos sirios porque venimos de un solo Dios porque a pesar de haber diferentes y gran cantidad de religiones todo somos iguales ante los ojos de un ser que no podemos ver pero que siempre nos acompaña, porque debemos ser honestos con nosotros mismos y con los demás, porque no debemos excluir a los demás por su origen sin saber nuestra procedencia.

    Somos sirios porque como seres humanos debemos cultivar la amistad sin importar las diferencias con los otros, ser personas consientes y ayudar a los demás. Compartir el sufrimiento de otros y apoyarlos en momentos difíciles porque como seres humanos estamos expuestos a cosas que nos pueden pasar y no sabemos cuando necesitaremos de otros y no se es humano si no se es solidario.

    Muchas personas viven en conjunto y no se tratan como personas consientes sino como animales creyendo que todo se resuelve con inquina , indomia e ignominia en una guerra con ninguna finalidad, debemos ante todo sobresaltar la ética y moral y no la ignorancia

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  8. La guerra es una masacre entre gente que no se conocen, en donde las personas se ven obligados a dejar sus casas, espantados de la guerra, buscan refugio en los países vecinos o recorren grandes distancias, pero muchos de ellos incluso los más pequeños son los que mueren con mayor facilidad, estas personas necesitan estar cada día mas unidos con mucha fe y esperanza de que algún día podrán volver a su tierra natal, algunos volverán con lágrimas en los ojos por seres que hoy ya no están pero estos se sentirán orgullosos que todavía quedaron personas de mucho valor para seguir luchando por un país donde puedan convivir con Tranquilidad, Armonía y Paz.

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  9. La guerra es una masacre entre gente que no se conocen, en donde las personas se ven obligados a dejar sus casas, espantados de la guerra, buscan refugio en los países vecinos o recorren grandes distancias, pero muchos de ellos incluso los más pequeños son los que mueren con mayor facilidad, estas personas necesitan estar cada día mas unidos con mucha fe y esperanza de que algún día podrán volver a su tierra natal, algunos volverán con lágrimas en los ojos por seres que hoy ya no están pero estos se sentirán orgullosos que todavía quedaron personas de mucho valor para seguir luchando por un país donde puedan convivir con Tranquilidad, Armonía y Paz.

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  10. Todos somos sirios.
    Porque en momentos de crisis los seres humanos siempre tratamos de ayudarnos no importa el color de piel, nacionalidad ni la religion a la que se pertenezca. En esos momentos pensamos mas en la supervivencia y eso lo podemos ver cuando suceden los desastres naturales, como las personas se ayudan porque tienen algo que los une y eso es que todos somos HUMANOS.

    Y asi deberíamos de ser siempre aunque en la sociedad que vivimos hoy en dia que esta llena de prejuicios y etiquetas sociales no lo permita del todo aunque pregone lo contrario, porque al fin y al cabo nadie sabe bien en realidad de donde proviene ya que los seres humanos hemos habitado estos terrenos desde hace miles de años y es por eso que todos somos Sirios, aunque estemos en nuestra hermosa Venezuela.

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  11. Todos somos sirios.
    Porque en momentos de crisis los seres humanos siempre tratamos de ayudarnos no importa el color de piel, nacionalidad ni la religion a la que se pertenezca. En esos momentos pensamos mas en la supervivencia y eso lo podemos ver cuando suceden los desastres naturales, como las personas se ayudan porque tienen algo que los une y eso es que todos somos HUMANOS.

    Y asi deberíamos de ser siempre aunque en la sociedad que vivimos hoy en dia que esta llena de prejuicios y etiquetas sociales no lo permita del todo aunque pregone lo contrario, porque al fin y al cabo nadie sabe bien en realidad de donde proviene ya que los seres humanos hemos habitado estos terrenos desde hace miles de años y es por eso que todos somos Sirios, aunque estemos en nuestra hermosa Venezuela.

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  12. Sin duda alguna se puede decir que Venezuela era el país de as posibilidades donde todo se podía lograr, miles de extranjeros y emigrantes venían hacia acá en buscan de sueños y triunfos es una triste realidad que esto ya no sea así, por esta misma causa Venezuela es un país con diferente razas sociales no solo descendemos de los indígenas sino también de emigrantes pero sin duda alguna, seamos descendientes de indígenas o no TODOS SOMOS VENEZOLANOS, por ello también es errado el día de la raza. Por otra parte tal vez un ejemplo de que todos podemos ser sirios es que allá se concentran las tres religiones del mundo es decir de una manera u otra nos estamos relacionando con este país.

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  13. El pueblo sirio hoy más que nunca es víctima del estigma que les ha atribuido las acciones brutales del conglomerado islamista ISIS (Islamic State of Iraq and Syria), traducido al español como “Estado Islámico de Irak y Siria”.

    El pasado viernes 13 de noviembre, 138 personas fueron asesinadas a sangre fría en la ciudad de París, pero además, el día de ayer murieron 147 personas en Kenia por un ataque atribuido a Al-Shabaab, otro grupo islámista radicado en Somalia, y por otro lado, Francia lanzó el día de hoy ataques a Siria, como represalia ante su sangriento viernes 13; ataques que, a pesar de estar coordinados, siempre dejan saldos de civiles inocentes muertos. En particular, estos últimos 2 años las acciones de estos grupos radicales han acentuado lo que no inició necesariamente el 11 de septiembre de 2001, pero que, sirve como fecha para acotar el día en el que “el terrorismo” se “naturalizó” en la cotidianidad de occidente. Con todo esto, quienes han sufrido las principales consecuencias son el pueblo musulmán, que al ser perseguidos y atacados gracias al estigma antes mencionado, terminan refugiándose en las corrientes más extremistas de su religión.

    Ahora bien, si retornamos a Venezuela, un sirio no representa un terrorista, sino un inmigrante más o “un árabe” de esos que venden electrodomésticos, similar al asiático que es chino para los ojos de la mayoría, o el “gringo” porque es rubio. Desde nuestra idiosincrasia, el inmigrante no representa un peligro, tal vez para algunos una molestia pero no un motivo de miedo, y hasta los momentos, no hemos sido blanco de ataques extremistas.

    Recordando el artículo de Fernando Mires “Acerca del uso correcto de las palabras en la política” (Prodavinci, 2015) y para evitar la amnesia selectiva, el difunto presidente Chávez quiso perpetuar el discurso del “inmigrante invasor que viene a desangrar el país”, sin embargo, mi amigo de origen italiano sirve unas pastas que ni te cuento en el restaurant "El Encuentro" en El Valle (Edo. Mérida) y el merideño sirio, islámico, judío, cristiano y posiblemente terrorista, que nos da Psicología Evolutiva, es un académico ilustre.

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  14. Todos somos hermanos porque somos hijos de dios, independientemente de las creencias de cada persona todos unidos somos uno solo. Lastimosamente hoy en día nos está consumiendo el odio, cada día vemos más muertes, más guerras, ataques terroristas donde lamentablemente las personas inocentes son las perjudicadas. Es triste que las personas que no estén en su sano juicio sean las responsable de tanto mal. Ojala y llegue el día en que todos podamos convivir sin violencia, que no hallan más países en guerras y que reine la paz en todo el mundo.

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  15. Manuel Alejandro Díaz Rincón C.I. 25.886.682

    A lo largo de la historia humana, nos han juzgado, discriminado y asesinado por nuestras religiones, por donde vivimos, por nuestro color de piel, por donde nacemos hasta por cómo nos vemos, algo muy lamentable ya que todos somos iguales, no por ser judíos de piel morena, por nacer en Venezuela y vivir en estados unidos o por vestir de rojo, se nos deben juzgar, ya que todos nacemos de igual forma y somos una misma especie, la humana, que por cualquier cosa, ya sea muy pequeña e insignificante, igual nos masacramos y nos juzgamos, algo que se da por la forma que nos han criado o por las cosas que nos han enseñado, de la forma que sea no se deberían enseñar ciertas cosas, que puedan afectar al cualquier ser vivo, ya que al final todos somos iguales.

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  16. Notable tema sobre tan importante legado como es el de nuestras abuelas que tienen la particularidad de contarnos cosas del pasado siempre con una buena enseñanza de por medio y de la mejor manera posible. Cabe destacar que merecen un gran respeto esas personas que le sirven a su país de manera honrada y sincera como lo es en este caso el esposo de dicha abuela; al hablar de esa Venezuela llena de oportunidades es inevitable transportarnos al pasado y pensar profundamente sobre eso, tener mayor consciencia que nosotros como personas debemos estar unidos ante cualquier situación para poder sobreponernos a ella y superarlas, sea la que sea, ya que existen muchos ideales que parten de prejuicios que simplemente buscan dividir para vencer y someter. No podemos quedarnos cruzados de brazos al tener presente distintas situaciones de injusticia, ya que en alguna oportunidad nuestra sociedad también la vivió y no estamos exentos de vivirla alguna otra vez, es por eso que debemos tenerlo presente siempre.
    Es muy buena la manera, la metáfora, la enseñanza en que se explica dicha enseñanza ya qu el humanismo debe vencerlo todo y hacernos mejores personas para hacer a un lado el odio y prejuicios y prestar la mano amiga a quien lo necesite, ya que en algún momento de nuestra vida aunque no lo sepamos hemos necesitado ayuda y hemos de necesitar ayuda más adelante, sin importar ninguna distinción el munda da muchas vueltas y se debe tener presente el ideal de hacer favores sin pedir nada a cambio, sobre todo a esos hermanos que aunque no tengan el mismo idioma, cultura o raza, son personas como nosotros, son seres vivos que pertenecemos a una raza civilizada y apta para el desarrollo contínuo y la mejoría a nivel global. Podemos acatar la fiel oración que dicha abuela a entonado con un profundo agradecimiento de que todos somos sirios porque es la señal o signo que mueve montañas al saber de terrible situaciones que han vivido y que siguen en esa eterna lucha. Somos sirios porque queremos lo mejor para quien lo necesite porque debemos sentirlo así para beneficiarnos unos con otros, teniendo el humanismo por delante, porque tenemos a un mismo Dios que a pesar que muchas culturas lo pintan de una manera diferente, es el mismo pero, con connotaciones distintas y él nos ha enseñado a querernos unos a otros sin importar nada, a ayudarnos siempre. Parto de el ideal de que somos Sirios porque somos todos somos iguales y nuestra vida gira en torno hacia un mismo objetivo. Somos sirios porque el Venezolano es amable y no es racista ante ningún tipo de situación y debe ser así, porque en algún momento de la historia en nuestro árbol genealógico debe correr sangre de dicha nación tan amedrentada aunque no lo sepamos.

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  17. Todos somos sirios.
    Por naturaleza todos somos diferentes pero el mundo o nosotros mismos nos hemos dado a la tarea dividirnos y aumentar las diferencias normales entres los hombres. Hay estereotipos impuestos en la sociedad de profunda desigualdad ante los pueblos, las razas, los géneros en fin vivimos fragmentado en todo punto de vista.
    La indiferencia no debe ser parte del vivir en común, como filosofía de vida, lo que le duele al prójimo me duele a mí, y lo que me duele a mí, le debería doler a nuestros semejante. Porque todos somos parte de la misma especie, hijos del mismo Dios. No podemos pretender hacernos de la vista ciega cuando mi hermano parece alguna dificultad, o ¿sería capaz de dejar morir las piernas, haciendo nada, cuando una de las extremidades superiores está en peligro?
    Cuando nos apiadamos somos como no los presenta el texto “todos somos sirios” y para ser, conforme a esta idea tenemos que desprendernos de lo que nos divide y separa como humanista. Ser sirio es romper muros como la famosa Muralla china, aceptar a los colombianos en territorio administrativamente nuestro, traspasar la fronteras mirar sin ninguna distinción de color de piel lugar de procedencia, religión de ideología política y tender la mano a quien lo necesite sin darle la espalda, porque no sabemos tampoco el día que necesitemos ayuda y no la recibamos por justamente haber actuado en contra cuando pude ayudar.
    Debemos estar prestos siempre a la colaboración a la solidaridad con las personas sumergidas por la desventura de la vida. Nos caracterizamos por ser amigo del convaleciente, abrimos la puerta a foráneos perseguidos y hostigados, nuestra actuación debe ser similar a la de una tierra fértil y prospera para la semilla que quiera crecer y dar frutos en el país más bello del mundo Venezuela.
    Las personas de buen corazón suplican en voz alta, el alto al fuego a la persecución que tanto nos daña he impide avanzar y evolucionar todos juntos unidos por el mismo propósito debemos cambiar de pensamientos, basta de tanto sufrimiento no podemos vivir como “perros y gatos” toda la vida que todos seamos sirios por el bien de todos y las próximas generaciones
    (Aprovecho para manifestar mis más sentidas palabras de condolencias a los parisinos caídos en el atentado terrorista del estado islámico, al mismo tiempo que repudio tajantemente estos lamentables hechos de intolerancia) “TODOS SOMOS PARISINOS”

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  18. En teoría todos somos sirios, en teoría, porque más allá de allá de las divisiones políticos territoriales, los idiomas, las culturas hay algunas cosas que nos une, ya sea por empatía o porque simplemente es una característica del SER humano pues un equilibrio desequilibrado ha de haber en tanta zozobra, el detalle esta cuando vamos a la práctica, pues si todos fuéramos sirios entonces te diría apreciado lector que mientras escribo esto , sirios bombardean a sirios en su propio país; el de los sirios, esto casi el fin de mundo o por lo menos el mundo los sirios.
    Ojala todos fuéramos sirios como lo dijo la nona, que nuestras banderas más lustres fueran la hermandad, fraternidad, solidaridad por encima de todo y en especial por encima de nuestras diferencias, pero no, algunos somos sirios y los otros no, esos son una rara especie en peligro de extinción; al igual que los sirios todos morirán muy pronto y con ellos la hermosura de una tenebrosa y maldita raza que pareciera destinada a pulverizar su hogar y a los que en él habitan.

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  21. Edward Arboleda
    C.I.V.26467714
    Exaltar lo universal permite el entendimiento y aceptación de las diferencias que conforman cada parte del universo.
    En primer lugar, el texto todos somos sirios busca de una forma u otra realizar una exaltación a lo universal para mostrarnos entre líneas que cualquier persona de hoy en día es resultado de la gran historia de sus antepasados anclado en una confusa cadena de civilizaciones cruzadas, que se merece el respeto y apreciación de todos en cualquier parte de mundo. Por otra parte, para algunos nos resultara imposible descifrar o construir un árbol genealógico que nos ayude a orientarnos un poco en cuanto a las vicisitudes de nuestra precedencia.
    En segundo lugar, el texto no lo solo nos muestra la profunda relación que pueden tener distintos pueblos con base en una misma creencia religiosa, sino que deja de forma muy diáfana que la solidaridad es parte de los valores que tiene la mayoría de la gente por naturaleza. Actos tan simples como ir en bus y levantarse para ceder el puesto a otra persona que lo necesite más que nosotros consolida la idea de que “todos somos sirios”.
    Para ser compasivos y entender las circunstancias difíciles por las que puede estar pasando otro, no debemos llevar un marbete de altruista o filántropo, a veces, solo estamos marcados por lo natural. Podemos llegar a ser naturalmente malos pero también podemos ser naturalmente buenos, grandes confusiones y contradicciones que forman lo que somos como seres humanos que buscan sobrellevar los problemas que se presentan a medida que transcurre el tiempo.

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  22. Jesús Marquina 25.560.559
    La humanidad ha vivido y sufrido las consecuencias de las guerras absurdas libradas a través de la historia y parece que no se aprende.
    Debemos respetar las diferencias de razas y creencias pues todos somos iguales a los ojos de Dios.
    Dejar el fanatismo todos los extremos son peligrosos. El hijo de Dios vino a este mundo a traer el mensaje del amor al prójimo. No hacer a otros lo que no queremos que nos hagan a nosotros.
    Venezuela un país lleno de diversidad humana donde crecieron descendientes lideres y en contacto con todos. Rescatar valores familiares.

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  23. Simples sobrevivientes de todo lo que ha sucedido alrededor del mundo.
    Que difícil es darse cuenta que esta vez nos toco a nosotros Venezuela, tierra llena de riqueza,ternura y afecto con magia incomparable que logro hacer hijos ajenos aquellos que huían, los adopto y ahora siento que nos dejara huérfanos,se reconoce tan poco de aquello que fuimos alguna vez.

    Se que todo mejorara tengo muchísima FE en ello, seremos mejores de lo que algun dia fuimos.
    Somos gente solidaria siempre con el dolor ajeno es nuestra naturaleza, pensando en el otro, como decir somos sirios, o franceses pero aveces nos cuesta dejar de lado nuestras diferencias se nos es mas fácil compadecer a otro que a nuestro vecino, somos el mundo.
    Venezuela solo ve corazones y deseos de aquellos que llegaron para ser mejores y hacernos mejores sin olvidar lo nuestro, debemos cultivar la cultura de amor, dolor por lo propio.

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  24. COMO PERROS CALLEJEROS NOS DEJÓ LA INMIGRACIÓN: Siempre son mejores los de raza; si se va a una tienda de mascota, se escucha decir: quiero el pastor alemán, el golden, pit bull, entre otros cuyos costos son altísimos, pero más alto aún son los recibos de vacunas, las medicinas, los cortes de pelo, la ropita, la comida y otras cosas más con los que se suelen consentir a estas mascotas. Ahora bien, son pocos los que sienten compasión por los perros callejeros, ni de gratis los queremos, pues su presencia espanta, así como también espanta la un mendigo ante aquellos que se creen de raza.

    Si algo hizo bien Hitler fue el de afianzar en el espíritu alemán la idea de ser de raza pura y por ende sentirse superiores al resto del mundo: !Heil Hitler! – Se escuchaba decir en la Alemania nazi- mientras se presenciaba el exterminio masivo de los judíos, que venían recorriendo el mundo para dejarlo impregnado de su perfume vehemente de fe.

    La creencia hacia una religión, en el caso de los judíos, de los islámicos y el de los cristianos, se ha convertido en uno de los tantos motores que ha promovido la inmigración. En el caso del cristianismo puede notarse cuando Jesús dijo a sus discípulos: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura” (Marcos 16:15) y en obediencia a él muchos abandonaron sus tierras para ser perseguidos y asesinados en su nombre.

    Más tarde se observa como los martirios vividos por los católicos-cristianos, luego fueron utilizados por ellos para predicar con violencia el evangelio, convirtiéndose en un gran ejemplo lo ocurrido en la época de la colonización, debido a que la inmolación fue brutal ¡Pobres indios! ¿Cuántos nos compadecemos de ellos? Actualmente, son muchos los que celebran el 12 de octubre, como una fecha de júbilo en el que hubo mestizaje; pero lo cierto es que ese día los venezolanos dejamos de ser de raza para convertirnos en callejeros.

    Sin embargo, antes y después de eso igual fuimos y seguimos siendo vistos como tal. Es que la mescolanza de raza no surgió en el siglo xv, sino desde los primeros tiempos porque fueron muchos los pueblos que se unieron para dar exterminio a la raza pura. ¿Pero qué ha sucedido con los venezolanos, será que nos sentimos más callejeros que otros porque el mestizaje lo tenemos más reciente?

    Lo sucedido en 1492 nos ha hecho sentir inferiores a otros, a cualquiera les abrimos las puertas para que nos roben las riquezas, y pareciera que nos gustara seguir siendo esclavos de…, depender de… para vivir de migajas ¡Nos aterra la libertad! ¿Entonces, cuándo vamos a ser los mejores? al parecer nunca. Sin darnos cuenta o a lo mejor sí, nos dejamos moldear para ser mediocres, y otras naciones nos aplauden porque necesitan de pueblos como el nuestro para mantenerse al mando. Con todo ello concluyo que, si los mejores ya están que se queden donde están, es preferible que nos sigan tildando de brutos a que nosotros tomemos el poder, porque aunque no lo creas, Venezuela, no es un sólo burro el que tienes sino todos.

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  25. Todos somos sirios
    Más que una simple expresión y un recorrido por la decencia, es internalizar ese aspecto de ciudadano que deberíamos de tener todos. Ya el hecho de ser humano hacerte una persona de servicio. Cuando comienzas con la práctica de servir a otros con amor demuestras lo ciudadano que poder ser. Un buen ciudadano está regido por principios, valores y sobre todo ética, y lo demuestra con su testimonio de vida. Un ejemplo muy claro de ciudadanía en los tiempos de Jesús es aquella parábola del buen samaritano, siguiendo esa vivencia podríamos decir que todos somos samaritanos cuando somos ciudadanos.
    ¿Por qué me baso solo en la ciudadanía?, porque es algo que se ha ido perdido entre tanta guerra y tantas cosas del mundo que solo hace que luche por el bien propio sin importar lo que le haga a los demás.
    Y desde el punto de vista docente, todo somos sirios cuando ayudamos a nuestro educando de la mejor manera. Ser un ejemplo claro de ciudadano y lo mejor que podrías impartir en las aulas de clase. El cambio siempre comenzara por uno.

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  26. Todos somos sirios porque tanto en Venezuela como en otros países, somos engañados por una figura política intentamos sobre vivir ante los fracasos de gobierno. Y lograr cambiar a Venezuela, para hacerla aquella Venezuela de un mejor futuro. Todos somos sirios porque compartimos la misma solidaridad, un mismo dios a pesar de las distintas religiones y cultos, sobretodo porque esta Venezuela hermosa a pesar de sus circunstancias es muy humanitaria y solidaria, lo cual nos identifica como venezolanos que somos…

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  27. El autor Pérez Lo Presti, en este texto relata en primer lugar como sus abuelos llegaron llegó a Venezuela, siendo inmigrantes luego de la Segunda Guerra Mundial, este país les abrió las puertas del futuro, les brindó esperanza. Enfoca su relato en que siente pertenecer a los pueblos perseguidos o amenazados, debido a sus raíces y en como uno de sus tíos fue rescatado de un precipicio por dos desconocidos, en inmediaciones del estado Lara, lo llevaron a casa, junto con quienes lo rescataron y la abuela declaró: "En esta familia todos somos sirios".
    Día aquel donde hicieron amistad, cultivaron el respeto e incluso el parentesco, con árabes provenientes del digno pueblo de Siria, siendo solidarios además con el dolor de quien por infortunio le toca vivir la guerra y la peregrinación como emigrante que busca un mejor porvenir para su familia.
    Se solidarizaron con los que son perseguidos por la crueldad y las condenas. Son sirios porque descendieron de la misma tradición que señaló que sólo existe un Dios. Son sirios, porque son universales. El autor indica que es sirio, islámico, judío y cristiano, porque es venezolano, porque sólo se puede ser una persona honesta cuando no se destierra a nadie por su origen. Menos siendo mestizo, sin posibilidades de desligarse de cualquier manifestación de lo que pretenda ser humano.
    Indica además, que ser ciudadano, a veces, necesariamente implica no pertenecer a una ciudad o a un país en particular. En ocasiones ser ciudadano del mundo es un asunto "supramoral".

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