Cuando José Ortega y Gasset señala que el hombre es el único ser “constitutivamente
infeliz”, se apega a la tradición de pensadores que consideran que la felicidad
es un estado ilusorio, alejado de la condición humana.
Esta tradición de asumir que la felicidad y la existencia se encuentran reñidas, se halla enclavada en lo civilizatorio y aparece en las más variadas tradiciones. Desde lo mitológico hasta en la reiterativa representación de la pérdida del paraíso terrenal como castigo divino, señalada en la instancia religiosa occidental.
Se exalta en la edad media cuando se preconiza la idea de que el mundo es un valle de lágrimas, y con sus múltiples altibajos, el siglo XX es el culmen de la materialización de los alcances de la autoagresividad humana, materializándose con dos guerras de alcances mundiales, una de las cuales tiene el sello imborrable de la significancia y el poderío de las armas nucleares. Nada más que el cuño de dos bombas atómicas poseen la marca de Caín propia del siglo pasado.
Celos, rivalidades, traiciones, intrigas, mentiras y transgresiones son parte de lo humano, descrito por personalidades que van desde Buda y su cruzada por hacer desaparecer el deseo, hasta Sigmund Freud, quien encuentra en la pulsión propia del placer, un punto de encuentro con las creencias orientales.
En términos generales podríamos decir que existe una especie de exaltación de la infelicidad como manifestación análoga de lo humano, dejando a un lado el ideal de felicidad como algo insulso y poco atractivo para quien se dedica a reflexionar sobre el tema. No es casual que los libros que más se venden son los que preconizan la fórmula para alcanzar la felicidad, casi todos llenos de banalidades y asumidos con una superficialidad que aburre. La razón es simple: Se intenta buscar una especie de receta casi mágica que potencialmente pudiese servir para todos a efectos de alcanzar ese estado tan anhelado.
Una de las cosas que caracteriza lo humano es el ansia de añadirle sabor a la vida, al punto de crear estados de malestar y desazón en una paradójica necesidad de darle sentido a lo vivido. Es frecuente escuchar expresiones como las que señalan que “la angustia es la sal de la vida”. Sin embargo no siempre ha sido así en el mundo occidental y no faltan los intentos por atrapar la posibilidad de llevar una vida feliz. Luego de Aristóteles, surgen en el mundo griego varias escuelas de pensamiento que se trazan como fin precisamente la felicidad. Incluso se asienta que la filosofía es una disciplina que debe servir para hacer al hombre feliz. Desde Epicuro de Samos (341 a.c.) y los epicureístas, quienes desde la escuela denominada “Jardín”, exalta el cultivo de los placeres no autodestructivos como el camino para alcanzar la felicidad, hasta los estoicos, cuyo máximo representante es Zenón de Citio (301 a.c.), preconizando el ejercicio de la razón y el control de las pasiones como camino para ser feliz.
A pesar de toda esta tradición, el tema de la felicidad pasa en ocasiones por ser asunto para tontos y desentendidos que se plantean alcanzar una especie de sucesión de condiciones espasmódicas, de insulsos “instantes felices”, como si se tratase de una sección de fotografía en la que por momento sonreímos y la mayor parte del tiempo nos apesadumbramos.
Un lastimoso fracaso por intentar comprender la felicidad se halla precisamente en la denominada “Psicología positiva”. Tratando de apegarse al tema del “bienestar psicológico”, termina siendo semillero de superficialidades que ni siquiera llega al nivel de “autoayuda”. Ser superficial puede convencer. Difícilmente trascender. La denominada “Psicología positiva” es un refrito que trata de imponer antiguas proposiciones como si fuesen originales. Muy estadounidense por su pragmatismo y carencia de profundidad conceptual, a duras penas intenta proponer paliativos antidepresivos y asume la creatividad como una especie de laborterapia banal.
Acercarse a los lados más sombreados de lo humano sigue siendo la única manera de penetrar y doblegar su condición mórbida, trampolín que permite franquear la psiquis y sondear posibles escenarios de salubridad.
Como tanto se ha insistido, muchas veces la historia del pensamiento pareciera ser una serie de notas a pie de página de los textos de Platón. La libertad y el conocimiento son a mi modo de entender eso que llaman felicidad. Libertad de ser conscientes de nuestros actos y deslastrarnos de las más primarias creencias; y el conocimiento que nos permita ver desde un poquito más alto la globalidad de los asuntos. Todo lo cual deriva en una disciplina inquebrantable que induzca el cultivo de los dos pilares de una condición que sobrepasa el simple instante. “Estar feliz” es asunto de un rato. “Ser feliz” es cuestión más ambiciosa en la cual una disciplina de vida puede abrir las distintas puertas que se nos presentan en las diferentes etapas de nuestra existencia.
Publicado en el diario El Universal de Venezuela el 07 de diciembre de 2015.
Es difícil definir claramente lo que significa felicidad, pero casi todo lo que hacemos, es con el fin de lograrla y aumentarla o para evitar la infelicidad. La felicidad se encuentra dentro de nosotros donde no hay que verla como un fin o una meta a alcanzar si no como algo que se vive día a día y momento a momento. En la vida de cualquier persona, existe la alegría y el dolor, situaciones fáciles y difíciles el problema surge, cuando le damos más importancia a las negativas y vivimos las positivas sin disfrutarlas, ni valorarlas.
ResponderEliminarUna persona que sabe ser feliz, disfruta plenamente cada momento de alegría, bienestar, satisfacción o belleza, por simple o pequeño que sea.
La alegría es parte de la felicidad, pero ser felices es algo más que estar contento
La felicidad es un estado de ánimo positivo, puede ser percibido de manera diferente por personas con diferentes temperamentos, y por tanto lo que para una persona puede ser una situación feliz para otra puede llevar aparejada insatisfacción e incluso frustración. La felicidad frecuentemente se considera positiva ya que nos permite sacar partido de las condiciones objetivas, favorece la actitud de abordar diferentes tareas llevándola al término propuesto. Es la sensación de bienestar y realización que experimentamos cuando alcanzamos nuestras metas, deseos y propósitos; es un momento duradero de satisfacción, donde no hay necesidades que apremien, ni sufrimientos que atormenten.
ResponderEliminarLa felicidad está presente en nuestras vidas, así sea por momentos transitorios ya que el ser feliz abarca muchos aspectos, es alcanzar aquellas cosas que deseamos y que nos llena satisfactoriamente como persona. A veces nos cuesta estar feliz ya que es una diferencial al serlo, ya que estar feliz depende de nosotros, a veces hay situaciones en la vida que nos marcan y nos deprimen pero no siempre todo es malo es una ley de la vida, la cual nosotros debemos aprender a superar y vivir de esos momentos que nos llenan y nos alegran como: el amor a una carrera, a una mascota, compartir en familia. En conclusión la felicidad es transitoria y está en nosotros mismos de darle significado a esta.
ResponderEliminarTrabajando el concepto de “psicología positiva” de acuerdo al artículo, considero que es igual a los productos que venden en los comerciales rápidos de televisión basados en un mismo concepto bastante rebuscado “si no lo tienes no eres feliz”
ResponderEliminarDe esta manera el pensamiento de gran parte de la población humana es que una gran cantidad de bienes materiales son inherentes a la felicidad. Aun así, tanto ese pensamiento como el manejado por las religiones monoteístas en donde la felicidad es otorgada solo por un ser supremo es bastante rebuscada. En fin, para gran parte de la sociedad ser feliz esta muy poco relacionado con el conocimiento, pero sí lo esta el éxito. Aquí es importante resaltar que una persona exitosa no necesariamente es feliz porque la comunidad toma el éxito sobre los logros obtenidos más que en los objetivos planteados. Un claro ejemplo de este punto son las mismas bombas nucleares, de por sí la energía nuclear y su exponente más peligroso actualmente las bombas nucleares fueron un éxito total, sin importar la felicidad o consecuencias de los mismos.
En un macro sistema como la civilización, la palabra felicidad es bastante difícil de conceptualizar, aun así como el mundo del hombre no puede dejar tal agujero en un concepto clave es ampliamente pensado que los países del primer mundo son el sinónimo de felicidad en este campo, no porque en verdad sea la realidad sino porque así necesita ser visto. Ahora en lo personal considero que, en un microsistema, es decir a nivel personal es más fácil establecer un patrón real del paradero de la felicidad, éste se encuentra en el conocimiento, sin embargo, volvemos al mismo problema planteado anteriormente creo que gran parte de las personas se ha equivocado en lo que deberían reunir en grandes cantidades y sobre todo como deberían usarlo. Así, llegamos a Venezuela, un país en donde 2 de cada 3 individuos conoce más acerca de Diosa Canales que de Jacinto Convit.
Entonces, es clave diferenciar entre conocer y saber conocer y si nos preguntamos ¿qué es felicidad? Debemos hacernos la pregunta de ¿qué es conocimiento?
La felicidad posee un papel muy importante en la sociedad porque gracias a este sentimiento podemos estar tranquilos en nuestro propio mundo interior. Aunque sea poco creíble, la felicidad viene de la mano con la misma tristeza, ya que, lo que para unos es alegría... para otros solo es un sentimiento negativo.
ResponderEliminarPartiendo de la idea de Gasset en la que refiere al hombre como único ser “constitutivamente infeliz”, se puede reconocer que, la felicidad, además de ser una fase artificial, es subjetiva. Todos, desde el momento en que nos hacemos conscientes de nuestras acciones, en la mayoría de las veces tenemos como única convicción el disfrute del objetivo, y aunado a ese gozo, está la felicidad. Es por esa razón que el autor plantea la felicidad como “un estado ilusorio”.
ResponderEliminarSin embargo, es importante señalar que la felicidad no depende de algo ó de alguien más, sino de nosotros mismos, pues, hay momentos en los que cuesta un poco, incluso, hasta pasamos por la etapa del dolor, pero no hay nada más satisfactorio que encontrar felicidad en nuestra propia soledad. Una vez conseguido esto, nuestros proyectos se vuelven más alcanzables y las emociones que en su proceso para obtenerlo podamos manifestar, podrán ser manejadas con serenidad y aceptación.
Esto pasa debido a que aprendemos a valorar cada instante que la vida nos regala, y canalizamos de manera positiva aquellas situaciones desagradables, o aquellas buenas que se muestren. De éste modo, la felicidad ya no es dependiente y tampoco está para llenar nuestra vida, sino para complementarnos la existencia. Es entonces, cuando se comprende que uno está feliz cuando considera la felicidad de manera accesoria, y es feliz cuando asume que todo en la vida es cuestión de actitud.
La felicidad es un estado, no es una cualidad, ni mucho menos es un valor. La felicidad es una paradoja, es querer el ser humano darle sentido a lo vivido. Es querer darle sabor a la vida.
ResponderEliminarDesde la antigüedad la felicidad forma parte de la filosofía, de allí surgió la frase “vida feliz”, puesto que la felicidad desde el punto de vista filosófico de algún modo exalta el cultivo se placeres, el uso comedido de la razón, el control de las pasiones, además de dominio de sí.
Algunos autores plantean que la felicidad es asunto de tontos, porque simplemente existen momentos felices, nunca se ha dado la felicidad plena.
En el ámbito psicológico ha surgido lo que llaman psicología positiva que a manera de auto ayuda, plantea la felicidad como cierto “bienestar psicológico” que ni siquiera llega a proponer situaciones en el campo de la autoayuda.
La vida nunca trae consigo felicidad plena, el estar feliz se da momentáneamente el ser feliz conlleva un ir venir de situaciones que el ser humano acepta y asume para sí, sintiéndose optimista, fortalecido y libre.
El estado de ánimo del ser humano se puede dividir en La infelicidad y la felicidad, la cual se podría decir que es la parte negativa y la parte positiva del hombre. Se puede decir que la Infelicidad es cuando el ser humano tiene problemas, o se encuentra triste por mil y un motivos, y la felicidad se debe al estado de ánimo de la persona, que se da por medio de actos, hechos, personas, causas, animales u otras.
ResponderEliminarHay que tomar en cuenta que a una persona la hace feliz el más mínimo detalle que le regalen, el compartir con la familia, y muchas otras cosas.
El estado de ánimo del ser humano se puede dividir en La infelicidad y la felicidad, la cual se podría decir que es la parte negativa y la parte positiva del hombre. Se puede decir que la Infelicidad es cuando el ser humano tiene problemas, o se encuentra triste por mil y un motivos, y la felicidad se debe al estado de ánimo de la persona, que se da por medio de actos, hechos, personas, causas, animales u otras.
ResponderEliminarHay que tomar en cuenta que a una persona la hace feliz el más mínimo detalle que le regalen, el compartir con la familia, y muchas otras cosas.
Particularmente me impresiona el contenido de este texto porque desde hace un buen tiempo que vengo intentando darle sentido a eso que llamamos “felicidad” , pero no conseguía darle yo solo buenas bases a mi concepto de felicidad por lo que me di a la tarea de compartir mi inquietud con mis familiares más allegados, cuando les preguntaba por la felicidad me decían las mayoría de ellos, que la felicidad no existía, que era un invento que el hombre se había metido en la cabeza para tratar de hacer más difícil su existencia. Por otro lado están aquellos que parecían un poco más optimistas y me decían que la felicidad tenía que estar presente en la vida solo en momentos muy cortos, segundos incluso. Tener sexo es ser feliz me decía un primo.
ResponderEliminarDe cada juicio que me dieron mis familiares saque una reflexión.
Del primer y más grande grupo de familiares entendí que para muchos la felicidad no existe y es causa del sufrimiento humano, pero creo que lo que más causa dolor a algunos es equivocarse, “algunos que no entienden que equivocarse es parte de la existencia”, estoy seguro de que hay quienes nos hemos equivocado buscando alcanzar comprender la felicidad con prejuicios tomados de otras personas. Si algo ha sido causa de problemas para mí y muchos de los que conozco, “todos lo que conozco” es precisamente hacer lo que otros nos han dicho, he sentido la necesidad de revelarme contra los prejuicios de la mayoría de mis familiares y seguir buscando el verdadero entendimiento de la felicidad.
En segundo lugar estaba esa minoría de personas que dieron a entender que la felicidad es solo cuestión de estar y no de ser indefinidamente feliz, pues podría asegurar que ser feliz es una cuestión de todos los días, de levantarse y decirse a uno mismo soy feliz, pero, sería una ridiculez tener dicha actividad si no se cultiva el conocimiento que nos permita justificar porque somos felices.
Usar ese conocimiento como bomba atómica para combatir esa forma de dirigirnos por la vida haciendo lo primero que se nos viene a la cabeza de homínidos que llevamos sobre los hombros. Cultivar el conocimiento y mantenerlo en práctica, no para evitar tener problemas, sino para saberlo usar a modo de resolver y superar dichos problemas.
Por ultimo recuerdo el comentario de aquel primo que me dijo que la felicidad era tener sexo, creo que de todos él fue quien estuvo cerca de entender cierta parte de lo que es la felicidad. El sexo es un encuentro libidinoso o carnal (es lo mismo) de una, dos o más personas, hay infinidades de formas en que la gente tiene sexo pero no voy a hablar aquí de ese tema.
Es símil el sexo con la idea de compañía porque lo común en ambos casos es disfrutar con otra persona. El gregarismo, desde la época de las cavernas ha marcado al hombre y lo va a seguir marcando puesto que el trabajo en grupo es mucho más fácil y aumenta las posibilidades de sobrevivir, partiendo de esto creo que la felicidad no puede ser actividad de uno solo, sino todo del nucleó familiar porque estamos diseñados para vivir en compañía. Compartir con los demás es parte de la felicidad. Se es feliz cultivando la felicidad desde uno mismo para con los demás.
La felicidad no podría ser alcanzada si nos aferramos a prejuicios para alcanzarla, tendremos que darnos a la tarea de buscarla por nuestra cuenta, cultivando el conocimiento que nos permita encaminarnos y defender nuestra postura hacia la felicidad, siempre en compañía de aquellos que consideremos de vital importancia, porque somos esencialmente gregarios.
Particularmente me impresiona el contenido de este texto porque desde hace un buen tiempo que vengo intentando darle sentido a eso que llamamos “felicidad” , pero no conseguía darle yo solo buenas bases a mi concepto de felicidad por lo que me di a la tarea de compartir mi inquietud con mis familiares más allegados, cuando les preguntaba por la felicidad me decían las mayoría de ellos, que la felicidad no existía, que era un invento que el hombre se había metido en la cabeza para tratar de hacer más difícil su existencia. Por otro lado están aquellos que parecían un poco más optimistas y me decían que la felicidad tenía que estar presente en la vida solo en momentos muy cortos, segundos incluso. Tener sexo es ser feliz me decía un primo.
ResponderEliminarDe cada juicio que me dieron mis familiares saque una reflexión.
Del primer y más grande grupo de familiares entendí que para muchos la felicidad no existe y es causa del sufrimiento humano, pero creo que lo que más causa dolor a algunos es equivocarse, “algunos que no entienden que equivocarse es parte de la existencia”, estoy seguro de que hay quienes nos hemos equivocado buscando alcanzar comprender la felicidad con prejuicios tomados de otras personas. Si algo ha sido causa de problemas para mí y muchos de los que conozco, “todos lo que conozco” es precisamente hacer lo que otros nos han dicho, he sentido la necesidad de revelarme contra los prejuicios de la mayoría de mis familiares y seguir buscando el verdadero entendimiento de la felicidad.
En segundo lugar estaba esa minoría de personas que dieron a entender que la felicidad es solo cuestión de estar y no de ser indefinidamente feliz, pues podría asegurar que ser feliz es una cuestión de todos los días, de levantarse y decirse a uno mismo soy feliz, pero, sería una ridiculez tener dicha actividad si no se cultiva el conocimiento que nos permita justificar porque somos felices.
Usar ese conocimiento como bomba atómica para combatir esa forma de dirigirnos por la vida haciendo lo primero que se nos viene a la cabeza de homínidos que llevamos sobre los hombros. Cultivar el conocimiento y mantenerlo en práctica, no para evitar tener problemas, sino para saberlo usar a modo de resolver y superar dichos problemas.
Por ultimo recuerdo el comentario de aquel primo que me dijo que la felicidad era tener sexo, creo que de todos él fue quien estuvo cerca de entender cierta parte de lo que es la felicidad. El sexo es un encuentro libidinoso o carnal (es lo mismo) de una, dos o más personas, hay infinidades de formas en que la gente tiene sexo pero no voy a hablar aquí de ese tema.
Es símil el sexo con la idea de compañía porque lo común en ambos casos es disfrutar con otra persona. El gregarismo, desde la época de las cavernas ha marcado al hombre y lo va a seguir marcando puesto que el trabajo en grupo es mucho más fácil y aumenta las posibilidades de sobrevivir, partiendo de esto creo que la felicidad no puede ser actividad de uno solo, sino todo del nucleó familiar porque estamos diseñados para vivir en compañía. Compartir con los demás es parte de la felicidad. Se es feliz cultivando la felicidad desde uno mismo para con los demás.
La felicidad no podría ser alcanzada si nos aferramos a prejuicios para alcanzarla, tendremos que darnos a la tarea de buscarla por nuestra cuenta, cultivando el conocimiento que nos permita encaminarnos y defender nuestra postura hacia la felicidad, siempre en compañía de aquellos que consideremos de vital importancia, porque somos esencialmente gregarios.
Particularmente me impresiona el contenido de este texto porque desde hace un buen tiempo que vengo intentando darle sentido a eso que llamamos “felicidad” , pero no conseguía darle yo solo buenas bases a mi concepto de felicidad por lo que me di a la tarea de compartir mi inquietud con mis familiares más allegados, cuando les preguntaba por la felicidad me decían las mayoría de ellos, que la felicidad no existía, que era un invento que el hombre se había metido en la cabeza para tratar de hacer más difícil su existencia. Por otro lado están aquellos que parecían un poco más optimistas y me decían que la felicidad tenía que estar presente en la vida solo en momentos muy cortos, segundos incluso. Tener sexo es ser feliz me decía un primo.
ResponderEliminarDe cada juicio que me dieron mis familiares saque una reflexión.
Del primer y más grande grupo de familiares entendí que para muchos la felicidad no existe y es causa del sufrimiento humano, pero creo que lo que más causa dolor a algunos es equivocarse, “algunos que no entienden que equivocarse es parte de la existencia”, estoy seguro de que hay quienes nos hemos equivocado buscando alcanzar comprender la felicidad con prejuicios tomados de otras personas. Si algo ha sido causa de problemas para mí y muchos de los que conozco, “todos lo que conozco” es precisamente hacer lo que otros nos han dicho, he sentido la necesidad de revelarme contra los prejuicios de la mayoría de mis familiares y seguir buscando el verdadero entendimiento de la felicidad.
En segundo lugar estaba esa minoría de personas que dieron a entender que la felicidad es solo cuestión de estar y no de ser indefinidamente feliz, pues podría asegurar que ser feliz es una cuestión de todos los días, de levantarse y decirse a uno mismo soy feliz, pero, sería una ridiculez tener dicha actividad si no se cultiva el conocimiento que nos permita justificar porque somos felices.
Usar ese conocimiento como bomba atómica para combatir esa forma de dirigirnos por la vida haciendo lo primero que se nos viene a la cabeza de homínidos que llevamos sobre los hombros. Cultivar el conocimiento y mantenerlo en práctica, no para evitar tener problemas, sino para saberlo usar a modo de resolver y superar dichos problemas.
Por ultimo recuerdo el comentario de aquel primo que me dijo que la felicidad era tener sexo, creo que de todos él fue quien estuvo cerca de entender cierta parte de lo que es la felicidad. El sexo es un encuentro libidinoso o carnal (es lo mismo) de una, dos o más personas, hay infinidades de formas en que la gente tiene sexo pero no voy a hablar aquí de ese tema.
Es símil el sexo con la idea de compañía porque lo común en ambos casos es disfrutar con otra persona. El gregarismo, desde la época de las cavernas ha marcado al hombre y lo va a seguir marcando puesto que el trabajo en grupo es mucho más fácil y aumenta las posibilidades de sobrevivir, partiendo de esto creo que la felicidad no puede ser actividad de uno solo, sino todo del nucleó familiar porque estamos diseñados para vivir en compañía. Compartir con los demás es parte de la felicidad. Se es feliz cultivando la felicidad desde uno mismo para con los demás.
La felicidad no podría ser alcanzada si nos aferramos a prejuicios para alcanzarla, tendremos que darnos a la tarea de buscarla por nuestra cuenta, cultivando el conocimiento que nos permita encaminarnos y defender nuestra postura hacia la felicidad, siempre en compañía de aquellos que consideremos de vital importancia, porque somos esencialmente gregarios.
La felicidad es una cualidad de cada ser humano el cual la vive de la manera que mejor cree posible. Pero la misma puede ser buena y mal, hacer cosas buenas, sentirse bien, ser libres entre otras muchas cosas es la felicidad para unos sin embargo están los que son feliz haciendo infeliz a otros. Todos buscamos de una manera u otra ser felices muchas veces sin importar a que costo, vivir a vida darle sabor creyendo que la felicidad esta en ser esporádicos.
ResponderEliminarSer una persona consiente y razonable te pueden abrir muchas puertas esta en cada persona escoger cual es la que más le conviene y sobre todo cual es la mayor felicidad te propicia. Así como el amor es el componente de la vida. La felicidad hace posible transcender en la vida, porque por encima de las circunstancias que le toque vivir a una persona la felicidad hace volver todo lo amargo en algo más factible de adquirir. Es necesario ver lo importante que es la felicidad para la vida humana, porque es lo único que muchas veces nos permite sobrevivir a todas las adversidad por más feas y duras que estas puedan ser. La verdadera felicidad no está en ser quienes no somos sino en ser quienes verdaderamente somos.
la felicidad, acaso es una utopia? el texto nos describe una pequeña reseña de lo que podríamos decir que es la historia de la felicidad; puesto que nos habla desde los tiempos de los filosofos y hasta profetas de la era antes de cristo cuando nos dice epicureístas, creador de la escuela "JARDIN"insiste que el camino y el ejercicio de la razón y el control de las pasiones es el apropiado para ser feliz.
ResponderEliminarpor tal motivo el tema es inspirador para algunos escritores del siglo xx, pero a los lectores se les presenta aburrido y tedioso y se concluye en dos pilares de una condición que sobrepasa el simple instante. “Estar feliz” es asunto de un rato. “Ser feliz” es cuestión más ambiciosa en la cual una disciplina de vida puede abrir las distintas puertas que se nos presentan en las diferentes etapas de nuestra existencia.esto quiere decir que cada ser humano posee las herramientas necesarias para ser feliz por lo tanto es responsable de cada instante de vida que disfruta y aprovecha para ser feliz y de esta manera descubre si existe o no la felicidad
Ser felices o estar felices. Dos frases muy comunes en nuestro diario existir. Sin embargo es mas común oir estoy feliz que soy feliz, y esto sucede generalmente cuando alcanzamos cierto objetivo en nuestro diario vivir. Una cosa que si es cierta es que generalmente las personas asociamos la felicidad al alcanzar ciertos posesiones materiales, las cuales nos hacen ambicionar cada día mas hasta el punto de frustrarnos y hacernos infelices.
ResponderEliminarTal como se asevera en la lectura, fuera de lo filosófico y los tratados psicológicos el ser felices que es nuestra estado natural depende de nosotros mismos a través del conocimiento de nuestro interior, de nuestras potencialidades y debilidades así como del amplio y equilibrado conocimiento de como funciona el mundo y la sociedad desde todas sus perspectivas.
Somos felices, tenemos todo para serlos pero debemos saltar las trivialidades y discursos fatalistas que cada día nos agobian para dar el verdadero valor a lo que realmente hace que perdure la felicidad en nuestra vidas
Ser felices o estar felices. Dos frases muy comunes en nuestro diario existir. Sin embargo es mas común oir estoy feliz que soy feliz, y esto sucede generalmente cuando alcanzamos cierto objetivo en nuestro diario vivir. Una cosa que si es cierta es que generalmente las personas asociamos la felicidad al alcanzar ciertos posesiones materiales, las cuales nos hacen ambicionar cada día mas hasta el punto de frustrarnos y hacernos infelices.
ResponderEliminarTal como se asevera en la lectura, fuera de lo filosófico y los tratados psicológicos el ser felices que es nuestra estado natural depende de nosotros mismos a través del conocimiento de nuestro interior, de nuestras potencialidades y debilidades así como del amplio y equilibrado conocimiento de como funciona el mundo y la sociedad desde todas sus perspectivas.
Somos felices, tenemos todo para serlos pero debemos saltar las trivialidades y discursos fatalistas que cada día nos agobian para dar el verdadero valor a lo que realmente hace que perdure la felicidad en nuestra vidas